Publicado: diciembre 18, 2025, 2:00 pm
La falta de sueño es uno de los grandes problemas que sufren a diario cientos de personas en nuestro país. Este problema de salud cada vez está más extendido y tiene consecuencias que van mucho más allá del cansancio. Dormir poco puede terminar afectando a la concentración, a la memoria y el estado de ánimo, pero también puede tener un vínculo con las enfermedades cardiovasculares, la obesidad, la depresión e incluso con los accidentes laborales y de tráfico.
Lo cierto es que existen estudios que demuestran que un 54% de la población en España no llega a descansar las siete u ocho horas recomendadas. Estos datos son preocupantes porque el descanso es imprescindible para poder funcionar de manera correcta el resto del día. Esto ha hecho que los neumólogos se pronuncien. Y es que la apnea del sueño es uno de los grandes responsables de no poder descansar bien. Este problema respiratorio provoca micro despertares que, a pesar de que la persona no lo nota, el cuerpo sí es consciente de ello.
En este sentido, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) ha dado algunas de las claves más importantes para poder hacer frente a la falta de sueño. De hecho, explican que se calcula que afecta al 4-6% de las personas adultas y según avanza la edad, la enfermedad aparece con más frecuencia. Además, puede ocurrir en niños.
Las claves para poder dormir bien
SEPAR explica que una exposición adecuada a la luz del sol puede ayudar a crear unos patrones de sueño que estén alineados al ciclo circadiano. Para ello, se puede pasear o hacer ejercicio. Eso sí, hay que evitar hacerlo a última hora del día. Otro de los secretos es seguir siempre los mismos hábitos, es decir, cenar e ir a dormir a la misma hora cada día y siempre una hora después de la última comida.
Decir adiós al móvil o la tablet media hora antes de ir a dormir para poder estar relajado. También se puede optar por adquirir la rutina de leer antes para poder conciliar mejor el sueño. Tener la habitación recogida, con una temperatura agradable, en silencio y con una luz suave puede ser importante a la hora de ir a dormir. Los sonidos tranquilos pueden ser de ayuda.
Evitar las cenas copiosas o altas en carbohidratos porque dan una sensación de pesadez. Ten presente que el alcohol no relaja, sino que provoca más bien un sueño superficial. Una ducha con agua tibia antes de ir a la cama puede ser ideal para conciliar el sueño.
La meditación u otro tipo de prácticas en las que se incluya la repetición de palabras son ideales para relajar la mente. Y por último, en caso de no poder dormir, sal de la cama después de 20 minutos en los que no has podido conciliar el sueño. De esta manera, no generas ansiedad. Lo mejor es leer o escuchar algo de música.
