Publicado: julio 13, 2025, 10:30 am
La muerte de Michu, expareja de José Fernando Ortega, ha desatado una nueva polémica en el seno de la familia. El hecho de que el hijo del extorero Ortega Cano, padre de la hija de ambos y que está incapacitado, abre una incógnita: ¿quién va tener la custodia de la niña, de apenas 8 años?
En los últimos días, de hecho, varios familiares se han pronunciado al respecto y se ha hablado mucho también de que la propia Michu habría dejado un documento firmado con su última voluntad en torno a este tema. «Michu habría dejado por escrito que, si le pasaba algo, quería que su hija se quedara con Ortega Cano«, desvelaba Kike Calleja.
Sin embargo, al parecer, la familia de ella no estaría dispuesta a que sea Ortega Cano quien ostente la custodia de la menor. Así, la madre de Michu se habría negado en rotundo a ello.
Más allá de la polémica familiar que afecta a un menor, otra información ha salido ahora a la luz sobre las presuntas malas condiciones de vida de Michu y su hija. Según ha contado Luis Pliego, director de Lecturas, en TardeAR, muchas veces ha realizado exclusivas con ella en su vivienda de Arcos e la Frontera. «Cuando presentó a su hija, la niña tenía en ese momento cinco meses. Fue dentro de la casa en la que vivía Michu con la niña y eran unas condiciones bastantes complicadas para vivir. Lo mejor para la niña, desde luego, es irse a vivir con Ortega Cano», sentenciaba el periodista.
«Cuando presentó a su hija en la portada de Lecturas él (José Fernando) tenía una orden de alejamiento. Lo había denunciado Michu y no podía acercarse a conocer a su hija. Aun así, en la entrevista el titular era que se habían comprometido por teléfono, porque no podían verse. O sea, era una relación bastante tóxica«, recuerda Pliego.
