Kamala Harris culminó este lunes en Pensilvania una notable reinvención política, una transformación que pocas veces se ha observado en la política estadounidense. De ser una vicepresidenta impopular, con menor aprobación incluso que su jefe, ha llegado al tramo final de las elecciones presidenciales de hoy con una subida inesperada en las encuestas y una campaña confiada en una victoria de último minuto. No obstante, la encuesta más certera sigue siendo la del día de las elecciones, y la candidata y su campaña se han movilizado para mantener la tensión y cierta incógnita hasta el momento mismo de que abra la primera urna. La confianza de Harris parece tal que dedicó su último día de campaña a un solo estado,… Ver Más