Para una entidad basada precisamente en el libre comercio y la economía libre como la Unión Europea, las amenazas del presidente norteamericano Donald Trump de imponer aranceles a los productos comunitarios han sido recibidas como si se tratase de un espantoso acontecimiento meteorológico o como un terremoto. Los miembros del Consejo Europeo habían previsto reunirse de manera informal para tratar específicamente el tema de la defensa, pero no han podido evitar que la perspectiva de una guerra comercial con el principal socio y aliado se colase en los debates y no de forma discreta. Inevitablemente, los europeos se han visto obligados a ponerse en lo peor. El fin de semana, mientras la Casa Blanca ponía en marcha las tarifas sobre… Ver Más