La odisea de María Corina Machado: una peluca, un disfraz y una precaria lancha pesquera - Venezuela
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La odisea de María Corina Machado: una peluca, un disfraz y una precaria lancha pesquera

Publicado: diciembre 11, 2025, 10:30 am

María Corina Machado se reencuentra con su madre en Oslo (Odd ANDERSEN/AFP)

 

María Corina Machado, líder opositora venezolana, realizó un viaje secreto y lleno de obstáculos para llegar a Oslo y recibir el Premio Nobel de la Paz. Sin embargo, debido a los retrasos en el trayecto, el galardón fue recogido por su hija, Ana Corina Sosa Machado.

Por infobae.com

La travesía, marcada por el secretismo y que comenzó con una peluca y un disfraz, evidenció los riesgos que enfrentan los dirigentes opositores bajo el régimen de Nicolás Maduro.

La salida de Machado de Venezuela se mantuvo en el más estricto secreto. Funcionarios estadounidenses confirmaron que la operación se planificó cuidadosamente para evitar cualquier filtración que pudiera poner en peligro la integridad de la dirigente.

El entorno de la opositora optó por no divulgar información sobre el viaje hasta que ella se encontrara fuera del país, una decisión motivada por la vigilancia constante del régimen de Maduro y el temor a represalias. Machado no había aparecido en público desde enero, lo que alimentó las especulaciones sobre su paradero y la posibilidad de que lograra llegar a la capital noruega.

El itinerario de Machado comenzó el lunes por la tarde, cuando, con una peluca y un disfraz, según pudo saber el Wall Street Journal, comenzó su huida de Venezuela. En primer lugar, debía trasladarse desde el suburbio de Caracas donde llevaba un año escondida hasta un pueblo pesquero costero, donde la esperaba una lancha.

Disfrazada y en peligro: WSJ reveló cómo María Corina Machado salió de Venezuela

El periódico citado informó que, a lo largo de 10 horas estresantes, Machado y dos personas que la ayudaron a escapar pasaron por 10 puestos de control militares, evitando ser capturados cada vez, antes de llegar a la costa a medianoche, dijo una persona cercana a la operación.

La opositora abandonó Venezuela por vía marítima rumbo a Curazao, una isla situada a 65 kilómetros de la costa venezolana. Y lo hizo en una lancha de pesca de madera en medio de un mar picado y fuertes vientos. “Coordinamos que ella iba a salir por una zona específica para que no volaran la embarcación”, dijo una persona cercana al operativo.

Casi al mismo tiempo que cruzaron, dos aviones F18 de la Armada de EEUU sobrevolaron el Golfo de Venezuela y pasaron aproximadamente 40 minutos volando en círculos cerrados cerca de la ruta que la llevaría desde la costa hasta Curazao. Desde allí, abordó un avión privado Legacy 600, matriculado en México y operado por JetVip Business Aviation, con capacidad para 13 pasajeros.

La aeronave partió del Aeropuerto Ejecutivo de Miami Opa Locka hacia el Aeropuerto Internacional Hato de Willemstad, en Curazao, donde recogió a Machado. Posteriormente, el vuelo despegó el miércoles a las 6:42 hora local, con destino a Bangor, Maine (Estados Unidos), donde realizó una escala técnica de casi cinco horas.

La última etapa consistió en un vuelo de más de seis horas hasta el aeropuerto de Oslo Gardermoen, completando un trayecto de casi 9.000 kilómetros. Machado llegó a la capital noruega en la madrugada del jueves, tras una odisea que requirió la colaboración de aliados políticos y familiares, así como la intervención de funcionarios estadounidenses.

A su llegada a Oslo, Machado se reunió en el balcón del Grand Hotel con familiares, amigos, aliados políticos de distintos países y decenas de venezolanos que la esperaron durante horas para celebrar el reconocimiento internacional.

El ambiente estuvo marcado por la emoción y el alivio tras días de incertidumbre sobre su paradero y la posibilidad de que lograra sortear los controles del régimen venezolano.

La líder opositora expresó su agradecimiento a quienes arriesgaron su seguridad para hacer posible su llegada, según relató en una conversación telefónica con Jørgen Watne Frydnes, presidente del Comité Noruego del Nobel. “Bueno, en persona, les contaré lo que tuvimos que pasar, y tanta gente que arriesgó su vida para que yo pudiera llegar a Oslo. Y les estoy muy agradecida y esto es una muestra de lo que significa este reconocimiento para el pueblo venezolano”.

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