Publicado: julio 24, 2025, 8:30 am
Matías Almeyda ha venido al Sevilla FC acompañado de un grupo de técnicos de su máxima confianza para que su idea de trabajo y de juego tenga impronta y, bajo su mando, el conjunto sevillista recupere el nivel perdido en las temporadas 23-24 y 24-25. Uno de ellos es el preparador físico, Guido Bonini, que está destacando en estas primeras semanas de trabajo en la pretemporada 25-26 por la tremenda intensidad que le está metiendo a cada sesión de trabajo, ya sea matinal o vespertina. Muy cercano en el trato con los jugadores, Bonini encabeza cada sesión de entrenamiento, corrigiendo y analizando en todo momento a la plantilla. Su estilo de trabajo mezcla ejercicios físicos con y sin balón y está imprimiendo un alto ritmo y una exigencia física que incluso los jugadores están destacando como positivo respecto a lo que venían haciendo con los últimos entrenadores y preparadores físicos. Luego serán los resultados, cuando a partir del próximo 17 de agosto en San Mamés ante el Atheltic Club empiece a rodar oficialmente el balón para el primer equipo sevillista en la temporada 25-26, los que terminen por valorar el impacto que tenga el trabajo de Bonini, pero no es menos cierto que su trabajo ya está provocando compromiso entre los futbolistas.