Publicado: julio 11, 2025, 6:30 am
La guerrilla kurda PKK ha iniciado este viernes su desarme mediante la destrucción de armas en el norte de Irak, lo que el grupo, que lucha desde 1984 contra el Estado turco, ha calificado en un comunicado como un paso de «buena voluntad» para el «éxito práctico del proceso de paz».
«Como muestra de buena voluntad y de nuestra determinación por el éxito práctico del proceso de paz y con el objetivo de continuar nuestra lucha por la libertad, la democracia y el socialismo mediante la política democrática y por vías legales, nos presentamos hoy aquí para destruir nuestras armas por voluntad propia«, señala el comunicado difundido por el grupo armado a través de la agencia kurda ANF.
La ceremonia ha tenido lugar cerca de la cueva de Yasana, a una decena de kilómetros al sur del embalse de Dukan, informa la televisión turca NTV. En las primeras imágenes se observa a miembros uniformados del PKK arrojando fusiles de asalto y otras armas a un gran caldero metálico con llamas.
Una importante delegación del DEM, el partido de la izquierda prokurda de Turquía, tercera fuerza del Parlamento turco, que hizo de facilitador del proceso de paz, se ha desplazado al lugar para presenciar el gesto.
Aunque durante la semana pasada la guerrilla había invitado a prensa internacional, el martes decidió vetar el acceso a los reporteros por «motivos de seguridad», pero prometiendo distribuir un vídeo del acto, una vez que haya terminado.
El Gobierno turco también ha evitado dar detalles sobre el proceso de paz con la guerrilla, que arrancó en febrero pasado con una carta abierta del fundador del movimiento, Abdullah Öcalan, encarcelado en Turquía desde 1999, y se consolidó en mayo con un congreso en el que el PKK proclamó su disolución.
El portavoz del partido gubernamental turco AKP, Ömer Çelik, explicó el miércoles pasado que el proceso no contará con «un tercer ojo», sino que únicamente se desarrolla entre la guerrilla y el Gobierno turco, sin observadores extranjeros.
Asimismo, apuntó que los miembros de la milicia que no tengan delitos pendientes pueden volver a Turquía, entregándose a las Fuerzas Armadas turcas en el norte de Irak, mientras que para los que sí consten como buscados por un delito «hay diversos procedimientos».