Publicado: marzo 28, 2025, 1:30 am
La Fiscalía ha pedido 18 meses de cárcel exentos de cumplimiento para el actor Gérard Depardieu por las agresiones sexuales de las que afirman haber sido víctimas dos trabajadoras de la película Les volets verts, durante el rodaje del film en septiembre de 2021.
La pena solicitada por la Fiscalía se ha conocido este jueves, en el cuarto día de proceso, antes del alegato de la defensa que pondrá el punto final al juicio, que quedará visto para sentencia una vez que se dé la palabra por última vez al acusado.
En esta misma cita judicial hablaron las abogadas de la acusación. Carine Durrieu-Diebolt, letrada de Amélie Kyndt, la decoradora de cine que sostiene que durante la grabación de Les volets verts el 10 de septiembre de 2021 la atrapó entre las piernas y la manoseó de la cintura al pecho, puso en paralelo este proceso con otros recientes de agresiones sexuales como el de Gisèle Pelicot porque comparten que, durante muchos años, esos comportamientos quedaron silenciados.
Según la abogada, ha habido «un sistema de impunidad» que protegió al actor de tener que responder de ese tipo de actos que llevaba cometiendo «durante décadas». Por ello, lo que ocurrió, según ella, es que el silencio que los rodeaba condujo a una «normalización».
Las razones que lo explican son, más allá de la prescripción de muchas de las supuestas agresiones sexuales por el actor que han denunciado recientemente hasta más de una veintena de mujeres, el hecho de que «había una relación jerárquica», porque Depardieu es «una potencia artística, una potencia económica» en el cine.
«Cuando toca el cuerpo de las mujeres, ejerce su poder sobre ellas» porque «se hay una relación de fuerzas», indicó Durrieu-Diebolt, que añadió que el actor practica incluso «hasta un menosprecio de clase».
«Hay -denunció la letrada- un sentimiento de poder absoluto» en esas circunstancias que deriva de una de las facetas de la personalidad de Depardieu: «Es fuerte con los débiles y débil con los fuertes».
La letrada considera que los hechos están claros, en particular porque, además de su propio relato, hay otros tres testigos que presenciaron «un contacto físico».
La abogada de la otra denunciante
Claude Vincent, abogada de la segunda mujer que lo acusa —que se hace llamar Sarah para preservar su verdadera identidad— insistió en el ambiente que dominaba en el plató, que dijo que era el habitual cuando estaba Depardieu: «Se habla de sexo durante todo el día«, en particular cuando se dirige a las mujeres.
«Aquí todo el mundo sabe y nadie denuncia«, se quejó la abogada, en relación a ese ambiente, y afirmó que Depardieu «menosprecia a las mujeres y a las clases» inferiores.
También dijo que el acusado «tiene su propia definición de la agresión sexual«, al referirse a unas declaraciones del actor durante el proceso, al menos en apariencia equívocas o confusas, cuando pareció decir que una agresión sexual era algo más grave que poner la mano en el trasero de una mujer, aunque luego puntualizó que él no había hecho eso.
Una defensa «particularmente agresiva»
Carine Durrieu-Diebolt, letrada de Amélie Kyndt, criticó que la defensa de Depardieu se haya mostrado durante el juicio, que empezó el lunes, «particularmente agresiva, violenta» y cargó contra su abogado, Jérémie Assous por haber caído en «un frenesí mediático» para tachar de mentirosas e interesadas a las denunciantes.
La abogada solicita para su representada que, junto a la condena, se imponga al actor el pago de una indemnización de 22.000 euros por daños morales (de los cuales 10.000 en concepto de «victimización secundaria») y 15.000 por costas judiciales.
Sarah sostiene que Depardieu le agredió tres veces durante ese mismo rodaje, en septiembre de 2021, una primera en la que quedó «petrificada» sin saber reaccionar, después de tocarle el culo cuando iban camino del plató, y otras dos en las que también le sobó el trasero y los pechos y la mujer le replicó diciéndole que no.
Para esta segunda denunciante, su letrada reclamó 20.000 euros por daños morales (10.000 por su «victimización secundaria»), 3.070 euros por gastos y 20.000 por costas judiciales.