En las últimas semanas, Espejo Público se ha convertido en el altavoz de varias mujeres que han decidido romper su silencio para denunciar los abusos que habían sufrido a lo largo de sus carreras en la industria del espectáculo o de la televisión.
Así, después de que la pasada semana la presentadora brasileña Regina Do Santos visitase el matinal de Antena 3, el programa recibió la llamada de María Abradelo, quien desempeñó el mismo oficio.
Este martes, Espejo Público ha emitido el testimonio de Carolina Figueras, una bailarina que participó en espectáculos entre 1980 y 1990 que, aunque no ha querido aportar el nombre del hombre que se extralimitó con ella, sí ha destacado que «era mal torero y peor actor».
«Era conocido por ser muy dandi, por ser muy ligón», ha agregado la artista que, además, ha señalado que este hombre se acercaba a ella en varias ocasiones con las manos en posición de agarrarle los pechos hasta que, finalmente, un día lo hizo.
«En un cambio de escenas, me pilló y me puso las dos manos en el pecho. Fui al regidor y le dije: ‘Quiero a este tipo en tablilla porque me ha metido mano’. Nadie de la empresa hizo nada. Nos volvimos a encontrar en el verano y me agredió físicamente, me cogió por las muñecas para pegarme. Me dijeron que tenía una fisura en la muñeca y me hacen un parte. La empresa me dijo que mejor me olvidase de esto si quería seguir trabajando«, ha recordado Figueras.
«Este señor ha sido un depredador sexual y lo sé porque lo he hablado con otras compañeras, que no quieren saber nada de esto. Ocho años después me volvió a pasar con un productor de televisión. A la mañana siguiente me llamaron diciéndome que les habían dicho que no me tenían que dar más trabajo«, ha agregado la exbailarina.
Finalmente, Carolina Figueras ha sentenciado: «A veces, ir a la Policía no es lo más práctico. Creo que se tiene que contar con denuncia o sin ella. Ten mucho cuidado porque los depredadores están ahí esperando la oportunidad».