Publicado: septiembre 13, 2025, 10:30 am
Por todos son conocidas las estrictas normas bajo las que se rige la vida en Corea del Norte, a veces con medidas que resultan difíciles de creer. La paranoia del régimen comunista de Kim Jong-un llega hasta legislar acerca de las palabras que se pueden o no se pueden usar.
Tal y como recoge el The Sun, los guías turísticos que dan la bienvenida a los visitantes rusos y chinos al balneario Wonsan, el más emblemático de su país, han recibido órdenes de que eviten palabras típicas de occidente.
Entre 20 y 30 guías están inscritos en un riguroso programa de formación dirigido por funcionarios del Departamento de Cuadros del Partido de los Trabajadores de Corea en la provincia de Kangwon.
«Los aprendices reciben instrucciones detalladas sobre cómo tratar y entretener a los turistas, y deben memorizar lemas y frases. El objetivo es enseñar a los profesionales del turismo a utilizar conscientemente el vocabulario norcoreano, evitando expresiones surcoreanas y préstamos extranjeros», según el medio Daily NK.
«Los aprendices deben decir dajin-gogi gyeopppang (pan doble con carne picada) en lugar de ‘hamburguesa’ y eseukimo (esquimal) en vez de ‘helado’. Y las máquinas de karaoke, muy extendidas en Corea del Sur, deberían llamarse «máquinas de acompañamiento en pantalla», dice la misma fuente.
El pasado mes de agosto, la BBC obtuvo un teléfono móvil norcoreano que contiene un corrector que evita que se escriba, por ejemplo, el nombre de Corea del Sur y propone ‘estado títere’ en cambio.