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Kalina de Bulgaria viaja al monasterio de China donde su hijo, Simeón, ingresará para perfeccionar su técnica de kung-fu

Publicado: abril 15, 2025, 12:30 pm

El príncipe Simeón Hasan, de 18 años, hijo de Kalina de Bulgaria y del explorador Kitín Muñoz, ha sido aceptado por los monjes del legendario monasterio chino de Shaolín, donde vivirá una larga temporada y perfeccionará su kung-fu.

Además, el joven, experto en artes marciales, como el taekwondo, estudiará la disciplina y filosofía espartanas que practican los monjes durante seis meses, según cuenta la revista Hola.

El joven ingresará en este centro, en la provincia de Henan a unos 50 km al sureste de Luoyang, donde imparten clase los mejores profesores del mundo en esta técnica, después del verano. Al terminar su instrucción, Simeón se presentará a las pruebas de acceso al cuerpo de los ‘boinas verdes’.

Los ‘boinas verdes’ son las unidades de operaciones especiales del Ejército español, también conocidas como el Mando de Operaciones Especiales (MOE), un cuerpo de élite del ejército español.

Para conocer el ambiente donde vivirá su hijo, Kalina y Kitín han viajado hasta esta provincia china. La princesa búlgara, la única hija del exrey Simeón y la española Margarita Gómez-Acebo (tuvieron cuatro hijos varones también), también es una consumada practicante de técnicas en defensa personal.

Durante su estancia en el monasterio, Kitín Muñoz y su mujer ultimaron los detalles de la admisión de su hijo y también comprobaron cómo viviría. En una entrevista concedida a Hola, Kitín, que llevará a su hijo en sus próximas expediciones, dijo: «Kalina y yo estamos de acuerdo en inculcarle sensibilidad hacia otros mundos. Conociendo otras formas de pensar, de sentir y hasta de rezar. Todo buen explorador conoce el código: puede que no lo entiendas, pero lo tienes que respetar. Eso es el principio de todo”.

El explorador y la princesa de Bulgaria también se sumergieron por un día en la cultura, disciplina y tradición del monasterio. Maestros del templo hicieron para ellos una exhibición de sus habilidades y Kalina quiso participar en una clase para experimentar algunas técnicas básicas del kung-fu.

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