Publicado: septiembre 18, 2025, 9:30 am
Jordi Cruz ha reflexionado sobre cómo el sector de la hostelería ha cambiado de mentalidad y, mientras antes se trabajaba echando muchas horas por pasión, ahora se valora más poder conciliar, algo que intenta ofrecer a sus trabajadores, pero pidiendo a cambio que ellos respondan equivalentemente.
Así lo defendió en Se me antoja, pódcast de la editorial gastronómica Montagud en el que confesó que se siente solo «todo el rato», sobre todo «en los tiempos que corren», que son «muy jorobados«.
«Hay un cambio generacional, ha cambiado la forma de pensar de nuestro oficio. Hemos pasado de ser espartanos, de meterle 14 horas y tenerlo como algo bonito, a buscar un equilibrio, hacer solo ocho horas y a entenderlo de una forma completamente distinta», opinó el jurado de MasterChef, quien, «como purista del oficio», siente que le «ha faltado ese margen de tiempo» para adaptarse a este cambio.
«Intentas hacerlo muy bien, que tu restaurante funcione, con tu personal que no rema igual, porque piensa diferente; encima están en la tele», enumeró el cocinero y aseguró que todo ello le hace estar «dando tumbos» en solitario. «Y, en algunos momentos, algunos de esos entes no tienen en cuenta el follón en el que estás metido. Pero es el juego, o juegas o quédate en tu casita y no llores».
Hablando de las ocho horas, el chef también habló sobre si era posible conseguir la excelencia en su restaurante con esas jornadas, algo sobre lo que él opinó que «la excelencia se encontraba el base al sacrificio absoluto«.
El catalán, con tres Estrellas Michelín, sostuvo que entiende esa visión purista y pasional de la profesión, pero también entendía a los trabajadores, pues a él también le «gustaría conciliar un poquito más» y disfrutar más su vida, algo que no ha podido porque ha estado regalándose a los demás.
«Antes valía con el ‘te pago bien’, ahora es ‘no quiero cobrar tanto, quiero tener más tiempo libre«, afirmó Jordi Cruz. «Yo quiero que tengan un buen sueldo y sean felices, porque la gente feliz sirve y cocina bien».
Según declaró, intenta pagar bien a sus empleados y también contentarle con sus jornadas, pero aseguró que luego la otra parte no responde siempre como esperaría.
«Es un poquito lo que me está pasando: que doy sueldos, tiempo, horas, y no hay ese vínculo de ‘creo en la empresa, quiero estar allí», dijo en el pódcast. «No te diré que falta vocación, es que no lo sé… Antes la gente duraba un poquito más, metía un poco más de chicha. Ahora con mucha facilidad uno no se presenta por la noche a trabajar. Y no puedes decir nadie, porque no eres el padre ni el propietario de nadie».