Francotiradores israelíes han matado la tarde de este lunes a dos gazatíes, entre ellos un niño en la ciudad de Rafah, al sur de la Franja de Gaza, según informa la agencia oficial de noticias palestina, Wafa, en medio del alto el fuego puesto en vigor este domingo. Extremo que confirmaba el propio ejército israelí poco después. «Se identificó a varios sujetos sospechosos que suponían una amenaza contra los soldados que operaban en varias zonas de Rafah de acuerdo con los términos del acuerdo de alto el fuego. Los soldados respondieron con fuego contra ellos», recogió un escueto mensaje de las fuerzas armadas.
Horas antes, Wafa informaba de que otros ocho palestinos, entre ellos varios niños, resultaban heridos en dos incidentes diferentes: uno después del bombardeo de un dron, y otro tras la explosión de un «objeto sospechoso» dejado por las tropas israelíes en la ciudad fronteriza con Egipto. «El Ejército actúa de acuerdo con el acuerdo de alto el fuego y mantendrá sus líneas defensivas como está acordado», aseguraron las fuerzas armadas de Benjamin Netanyahu.
La tregua firmada entre Israel y Hamás -que arrancó este domingo a las 11.15h hora local- contempla tres fases: la primera, estipula el cese de los ataques y combates en la Franja de Gaza por un periodo de 42 días, en el que se intercambiarán gradualmente 33 rehenes cautivos por cerca de 1.900 presos palestinos. Sin embargo, la Comunidad Internacional reconoce la «fragilidad» de este acuerdo y teme que ataques puntuales del ejército puedan hacer saltar por los aires este pacto con consecuencias tanto para los rehenes como para la población gazatí.
Israel y Hamás deberán negociar, a partir del día 16 de alto el fuego, los términos de la segunda fase del acuerdo, que conduciría a la Franja de Gaza hacia el cese definitivo de las hostilidades.
Poco después del inicio de la tregua, el Ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, ya remarcaba que el pacto era «temporal», puesto que Israel continúa comprometido a desmantelar las capacidades militares y políticas de Hamás. Algo que, reconoció Saar, el Ejército no ha conseguido pese a haber mantenido una devastadora ofensiva de 471 días sobre el enclave.
La cifra total de muertos en Gaza por ataques israelíes desde el inicio de la guerra hasta la entrada en vigor del alto el fuego asciende a 47.035, según el último recuento de personas fallecidas publicado este lunes por el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás. En las últimas 24 horas, al menos 60 personas han muerto y otros 62 cadáveres han sido recuperados y trasladados a los hospitales de la Franja. Además, la Defensa Civil Palestina ha publicado un informe advirtiendo que unos 2.840 cuerpos no han sido hallados debido al uso de armas usadas por las tropas capaces de evaporarlos.