Publicado: agosto 5, 2025, 1:30 am
Después de que el expresidente ruso Dmitri Medvédev criticara el ultimátum que Estados Unidos le dio a Rusia para que frene la guerra de Ucrania, el presidente Donald Trump ordenó este viernes desplegar dos submarinos nucleares. Fue su respuesta a lo que consideró «provocadoras declaraciones» de Medvédev. «Las palabras son muy importantes y, a menudo, pueden tener consecuencias imprevistas; espero que este no sea uno de esos casos», dijo Trump.
Lo que anunció Trump fue que dos sumergibles serían movilizados en las «regiones correspondientes», sin especificar la ubicación concreta. «Es un bocazas», dijo después del expresidente ruso y justificó la movilización como una medida para garantizar la seguridad nacional. El inquilino de la Casa Blanca dijo este sábado que los dos submarinos están ahora «más cerca de Rusia».
El presidente no especificó la clase de submarino del que se está hablando, pero esa es la práctica habitual, ya que el Pentágono suele tener la obligación de guardar silencio sobre los movimientos de su flota submarina.
Todos los sumergibles de la fuerza submarina de EEUU están propulsados por reactores nucleares, pero no todos llevan armas nucleares. Hay tres clases:
- Submarinos de Misiles Balísticos (SSBN).
- Submarinos de Misiles Guiados (SSGN).
- Submarinos de Ataque Rápido (SSN).
Todo apunta a que las unidades que se han movilizado tras la orden de Trump son de la clase Ohio, que son SSBN, y algunos de ellos SSGN.
La Armada de los EEUU cuenta con 14 submarinos de misiles balísticos clase Ohio, a menudo conocidos como boomers, detalla CNN News. Están diseñados «específicamente para el sigilo y el lanzamiento preciso de ojivas nucleares», según una ficha técnica de la Armada, que especifica que estos SSBN transportan el 54% de la capacidad de disuasión nuclear del país.
Cada uno puede transportar 20 misiles balísticos Trident con múltiples ojivas nucleares. Los Trident tienen un alcance de hasta 7.400 kilómetros, lo que significa que no necesitarían acercarse a Rusia para impactarla (podrían hacerlo desde cualquiera de los océanos).
Con 170 metros de largo, los SSBN de clase Ohio desplazan casi 19.000 toneladas sumergidos y tienen una tripulación de 159 personas. Pueden alcanzar una velocidad de 37 kilómetros por hora. Son potentes elementos de disuasión nuclear, ya que se espera que sobrevivan al primer ataque del adversario. Sus movimientos se encuentran entre los secretos mejor guardados de la Armada.
De submarinos de misiles balísticos a guiados
Pero en la década de 1990, el Pentágono decidió que la Armada no necesitaba tantos SSBN clase Ohio y convirtió cuatro de ellos en SSGN (submarinos de misiles guiados): el USS Ohio, el USS Michigan, el USS Florida y el USS Georgia. Los analistas creen que dos de ellos son los que ahora ha movilizado la Casa Blanca.
Un SSGN es indetectable y tiene autonomía para operar en alta mar hasta 15 años. Según la Armada de los Estados Unidos, estos submarinos son esencialmente bases encubiertas flotantes que ofrecen «capacidades sin precedentes para misiones de ataque y operaciones especiales desde una plataforma sigilosa y clandestina».
En lugar de los misiles balísticos Trident, portan misiles de crucero Tomahawk, armas convencionales utilizadas para ataques terrestres de precisión. Cada uno puede transportar hasta 154 de ellos, con una ojiva de alto explosivo de hasta 454 kg y un alcance de aproximadamente 1.600 kilómetros.
También, dice la Armada, estos submarinos clase Ohio convertidos en SSGN pueden transportar tropas, que pueden desplegarse clandestinamente desde cámaras de bloqueo en antiguos tubos de misiles balísticos. Así, pueden apoyar misiones de las Fuerzas de Operaciones Especiales, con espacio para hasta 66 personas.
Los movimientos de los SSGN son altamente clasificados, pero en los últimos años la Armada ha registrado ocasionalmente su presencia cerca de puntos de conflicto militar para enviar un mensaje de disuasión. El USS Ohio ha estado muy activo en el Pacífico este año, según cuenta TVE, y esta semana atracó en Brisbane (Australia) como parte de unas maniobras para reforzar la presencia militar estadounidense en esa región.
La clase Columbia, el futuro
Finalmente, están los submarinos de ataque rápido (SSN). Hay medio centenar en servicio y constituyen el segmento más grande de la flota estadounidense. Estos submarinos son versátiles, ya que rastrean buques enemigos, pueden lanzar Tomahawks, recoger información y apoyar a las fuerzas especiales. Existen tres clases: Los Ángeles (23), Seawolf (3) y Virginia (23).
Mientras, se cree que la próxima generación, la clase Columbia, está en construcción. Se espera que el primero de estos submarinos, según los informes, esté en patrulla para 2030, con la misión de mantener la disuasión nuclear hasta bien entrada la década de 2080.