Publicado: junio 12, 2025, 7:30 am
Ha sido un susto importante, pero al menos ya va, poco a poco, resultando menos preocupante de lo que en un principio parecía. Porque la noticia fue que la princesa Amalia de Orange, quien es la heredera al trono de los Países Bajos, era operada de urgencia este pasado martes. La intervención médica fue un éxito, de hecho durante el transcurso de este mismo jueves está previsto que le den el alta hospitalaria, pero aún quedan varias semanas para que se recupere completamente. Y no es para menos: se había fracturado el brazo tras una caída producida mientras practicaba una de sus mayores aficiones, montar a caballo.
Como no podía ser de otro modo, el accidente de la princesa de 21 años ha trastocado a toda la familia real neerlandesa y, especialmente, la de sus padres, los reyes Guillermo Alejandro y Máxima de Holanda. El ejemplo claro fue el de su madre, a quien la noticia le sorprendió mientras se encontraba en la inauguración de la conferencia sobre salud mental y bienestar estudiantil de la Fundación MIND Us, en el palacio Noordeinde de La Haya, y de la que tuvo que salir visiblemente preocupada y consternada.
La reina salió apresurada para hablar por el móvil, donde había recibido el mensaje que leyó cariacontecida, y así obtener más información de lo que había ocurrido —aunque hoy por hoy no se saben las circunstancias exactas del accidente—, lo que impacientó al resto de los congregados, especialmente a los periodistas. Aunque regresó y terminó el acto, en cuanto este terminó, se marchó con celeridad al UMC Utrecht, donde su primogénita fue intervenida.
Ahora, ya más calmados los ánimos y tras haber podido estar tiempo junto a su hija y los doctores, los monarcas han reaparecido en los diferentes actos que tenían agendados, aprovechando dichos compromisos para hablar por primera vez de la caída de su hija practicando hípica —una afición que comenzó cuando tenía 4 años y que ha mantenido a lo largo del tiempo, especialmente por la predilección que siente por su caballo, Mojito—, así como de la operación.
Por un lado, la reina Máxima ha participado en la Cumbre Global del Foro de Bienes de Consumo que ha tenido lugar en Ámsterdam. Como era de esperar, los periodistas no han tardado en preguntarle por el estado de salud de la princesa, momento que ha aprovechado para agradecer a todos los medios el interés que han mostrado por la salud de la heredera al trono, como han podido recoger las cámaras de RTL Boulevard. «Sí, se encuentra bien. Ahora mismo en concreto no lo sé, por supuesto, porque no estoy con ella, pero está bien», ha explicado Máxima este miércoles, dirigiéndose nada más terminar el acto al hospital donde estaba ingresada.
Asimismo, el rey Guillermo Alejandro de Países Bajos también ha tenido tiempo de hablar de la evolución del estado de salud de la princesa de Orange-Nassau al atender a la prensa durante la inauguración de un nuevo centro de investigación de Heineken en Zoeterwoude, al este de La Haya. «Me ha impresionado mucho, a pesar del dolor intenso. Lo está llevando bastante bien, con mucha valentía, estamos muy orgullosos de ella, de cómo ha superado ya la operación de ayer y porque, afortunadamente, se encuentra mejor», ha declarado el monarca, quien por la tarde acudió a la inauguración de un festival, si bien lo hizo en solitario dado que su esposa se encontraba en el UMC Utrecht junto a su hija.
El posado oficial
El mayor contratiempo, más allá del obvio tiempo de recuperación de la princesa, es para el posado oficial del verano de la familia real neerlandesa. Y es que esta tradición, con el que la monarquía de Países Bajos da por inaugurada la temporada estival, siempre reúne a los reyes con sus tres hijas, la propia princesa Amalia, y a sus dos hermanas pequeñas, las princesas Alexia y Ariane, además de a Mambo, el caniche de la heredera.
Este año la cita estaba prevista para realizarse precisamente este jueves 12 de junio, con los fotógrafos ya citados para realizar el idílico reportaje en los jardines del Palacio Huis ten Bosch, uno de los cuatro palacios oficiales de la familia real. Por ello, según ha informado el Servicio de Información del Gobierno (RVD en sus siglas en neerlandés), la cita con los reporteros gráficos se ha pospuesto hasta el 30 de junio, cuando la heredera esté recuperada al cien por cien de su accidente.
Se trata, además, de un día especial, porque será la primera oportunidad de ver a los cinco miembros más importantes de la monarquía juntos de nuevo, porque este año la princesa Alexia ha estado estudiando en Londres mientras que la princesa Ariane se graduaba recientemente en Italia del año que ha realizado cursando el bachillerato internacional —el mismo que ha finalizado la infanta Sofía—.
No sería, empero, la primera vez que en uno de los posados veraniegos precisamente la princesa Amalia aparece con algún problema. Fue en el verano de 2016 cuando las fotografías oficiales mostraban a la familia real en los jardines de la residencia privada que tienen en Wassenaar, y con la heredera utilizando muletas y con el pie vendado, ya que no podía apoyarlo al haber sufrido un esguince de tobillo.