Publicado: marzo 5, 2025, 11:00 am
La industria de dispositivos médicos en México enfrenta incertidumbre ante la falta de claridad sobre la aplicación de nuevos aranceles por parte de Estados Unidos, que no solo encarecerían los productos, sino que afectarían a las cadenas de suministro, por lo que evalúan opciones para mitigar el impacto.
“Es muy temprano para decir (las implicaciones) de los aranceles hasta que no tengamos bien definido cómo van a aplicarse. Estamos en esa fase de entenderlo un poco más a profundidad para poder actuar de una manera más organizada y efectiva”, explicó el presidente de la Asociación Mexicana de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos (AMID), Carlos Escobar.
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“Si (Estados Unidos) aplica el 25%, sería un incremento en ese mismo monto en los insumos médicos, pero podría ser más aún en caso de que aplique a los productos que pasan varias veces por la frontera”, anotó.
Este 4 de marzo entró en vigor los aranceles del 25% que el gobierno de Estados Unidos ordenó a las importaciones desde México y Canadá.
Destacó que el impacto variará según las características de cada empresa, desde aquellas que dependen de insumos extranjeros hasta las que operan bajo un modelo de manufactura local.
“Cada empresa, dependiendo el footprint que tiene y de dónde trae las materias primas, tendrá que hacer un análisis para aumentar la eficiencia dentro de la cadena de suministro o para trasladar estos costos al consumidor final”, añadió.
“Eso va a ser caso por caso dependiendo la terapia o el nivel de producción y transformación que tenga en el país. Entonces, por más que fabrique en Estados Unidos si las materias primas vienen de China, de Canadá o de México se van a ver impactados igual”, subrayó.
La industria de dispositivos médicos está altamente expuesta al mercado estadounidense.
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Más del 90% de las exportaciones de dispositivos médicos hechos en México se destinan a Estados Unidos, por lo que cualquier cambio en las tarifas arancelarias podría repercutir en una industria que genera más de 160,000 empleos.
Aunque algunos fabricantes podrían considerar la opción de trasladar sus líneas de producción a Estados Unidos, enfrentan desafíos como altos costos de inversión y largos procesos de aprobación regulatoria.
Ante esto, la diversificación de mercados hacia Europa y Asia se mantiene como una alternativa viable para reducir la dependencia del mercado estadounidense y minimizar los riesgos.
“Sin duda nos preocupan las consecuencias del alza en las tarifas”, manifestó el nuevo presidente de la AMID.
Agregó que la industria está trabajando para sensibilizar a las autoridades sobre la importancia del sector, no solo desde una perspectiva económica, sino también en términos de la responsabilidad que tienen con los pacientes de ambos países.
“Creo que ni nosotros como industria ni el gobierno debemos bajar los brazos con este tema porque entendemos las implicaciones que puede tener hacia adelante… y porque afecta directamente a la salud de las personas”, añadió.
Por lo que la prioridad es garantizar el acceso a dispositivos médicos para los pacientes, tanto en México como en Estados Unidos.
