En un embarazo normal, el embrión está dentro del útero. pero si se implanta fuera de esta zona se le denomina ‘embarazo ectópico’, un fenómeno que se produce en el 1% de las gestaciones, y lo más frecuente es que se localice en la trompa de falopio. Pero todavía hay descritos casos más infrecuentes de embarazos, sería la coexistencia de un embarazo dentro del útero y otra fuera, es lo que se conoce como embarazo heterotópico «Un embarazo heterotópico es algo excepcional, un caso extraordinario y muy grave, en caso de no diagnosticarlo y tratarlo lo antes posible, suele afectar a una de cada 30.000 gestaciones, aunque su incidencia ha aumentado en los últimos años, principalmente por algunos tratamientos empleados en técnicas de reproducción asistida. De no tratarse a tiempo puede tener un desenlace fatal y poner en peligro la vida de la futura madre», advierte el Dr. Juan Vidal Peláez , director de la Unidad de la Mujer del Hospital Ruber Internacional de Madrid . «Es una situación que no suele observarse en las primeras exploraciones al encontrar ya el embrión en buen estado dentro del útero, por lo que no se busca fuera», destaca este reputado ginecólogo. Pero uno de los peligros de esta situación es la dificultad en su diagnóstico, uno de los síntomas más frecuentes puede ser el dolor, siendo muchas veces complicado saber su causa. «En estas situaciones el embarazo que está situado fuera del útero va creciendo y llega un momento en el que la trompa de falopio se puede romper, ya qué es un conducto estrecho y que no da de sí como el útero, y se puede producir una hemorragia, dando lugar a un cuadro serio y grave, que pone en peligro la vida de la madre, y que ha sido causa de muertes maternas. Mientras, la doctora Sara Rubio Muñoz , médico adjunto del mismo servicio hospitalario, subraya que un embarazo heterotópico supone un reto diagnóstico Reconoce en este punto que el diagnóstico de sospecha de un embarazo heterotópico puede ser muy complejo de inicio, sobre todo saber que los síntomas que describe el paciente puedan deberse a esta situación. La paciente puede referir dolor abdominal inespecífico, que puede ser un síntoma habitual en los primeres meses de embarazo. Pueden ser contracciones del útero y/ o cambios propios que se producen al inicio de la gestación, sin poder diferenciar si es algo normal». En el caso de un embarazo heterotópico, los síntomas clínicos que manifiesta el paciente pueden ser más evidentes si se produce la rotura del embarazo albergado fuera del útero (principalmente en la trompa de falopio) en estos casos, detalla esta ginecóloga, suele producirse malestar general, palidez, debilidad, la mujer se encuentra sin apenas fuerza, y con mucho dolor abdominal (irritación peritoneal); «todos ellos signos que deben hacer pensar que tiene algo grave», remarca. En una primera exploración cuenta que lo habitual es que parezca que todo está normal, pero algunos síntomas como el intenso dolor nos hace sospechar que puede haber una causa importante se deben realizar más pruebas, tal y como hemos contado: la exploración clínica del paciente y la ecografía serán fundamentales para poder sospechar el diagnóstico. en este tipo de embarazos, mediante la ecografía confirmaremos la normalidad del embarazo intrauterino , el latido cardiaco del embrión y deberemos valorar La presencia de signos ecográficos sospechosos de otras situaciones. por ejemplo, en el caso de embarazo heterotópico, la presencia de otro saco gestacional fuera del útero, la presencia de líquido libre fuera del útero, el dolor intenso referido por la paciente durante la exploración abdominal y vaginal, etc. Es importante destacar que en un embarazo no se pueden realizar determinadas pruebas, ante el efecto que estas pueden tener sobre el desarrollo fetal, como un tac, o una resonancia. en este sentido, el Dr. Julio Álvarez Bernardi , responsable de cirugía de la Unidad de la Mujer del Hospital Ruber Internacional de Madrid , subraya que ante un cuadro de dolor abdominal y sospecha de hemoperitoneo (sangre en la cavidad abdominal) coincidiendo con un embarazo hay que realizar una cirugía de urgencia, para conseguir un diagnóstico temprano, que será fundamental para preservar la viabilidad del embarazo y la salud de la madre. Se trata de una situación de extrema gravedad, que en el pasado por falta de medios diagnósticos fue causa de numerosas muertes maternas. Hoy en día, si se tiene conocimiento y experiencia en técnicas de cirugía mínimamente invasiva, como es la laparoscopia (mediante un telescopio conectado a una cámara de alta definición) se introduce en la cavidad abdominal y se pueden realizar por pequeñas incisiones procedimientos quirúrgicos con alta precisión y seguridad para el paciente. En el caso del embarazo heterotópico, el embrión de la trompa puede haber sido desechado por el cuerpo de la paciente, dando lugar a un aborto tubárico y en algunos casos rompiendo la trompa de falopio. En estos casos se procede a extirpar la trompa de la paciente, que se envía después a analizar, para que se confirme que, efectivamente, el tejido es concordante con la presencia de un embarazo en una localización fuera del útero Mientras, Alejandro Ruíz Pereza , médico adjunto del servicio de anestesiología y reanimación, subraya que la anestesia conlleva un riesgo adicional en estos casos al encontrarse la paciente embarazada, se tienen que utilizar fármacos que no afecten al desarrollo fetal y además el anestesista tendrá que tener un control especial de las constante vitales del paciente, vigilar con precisión la pérdida sanguínea y de esta manera podrá prevenir complicaciones para la madre y el desarrollo normal de su embarazo. Tras la intervención, se comprobará la viabilidad del embarazo intrauterino mediante una ecografía con la que se confirmará que el embrión se encuentra bien y evoluciona favorablemente, por lo que se pauta un seguimiento para el embarazo, siendo posible dar a luz a un recién nacido sano, y en el futuro estas mujeres pueden perfectamente tener otros embarazos, a pesar de tener una sola trompa.