Publicado: abril 8, 2025, 5:00 am
La reutilización de los alimentos probablemente no era ninguna novedad en tiempos pasados, pero hoy en día cuando tenemos delante una fruta o una verdura solo vemos un uso. Con las frutas esto es especialmente erróneo, ya que incluso las de cáscaras más insospechadas como pueden ser los kiwis, esconden secretos de salud muy interesantes. Diversos estudios se han fijado últimamente en otra fruta común en España.
Además de conocer todo el partido que podemos sacar de los alimentos naturales estamos contribuyendo a la sostenibilidad del planeta, que nunca está de más dado el momento actual que atraviesa. En concreto, la naranja, fruta sobre cuya cáscara se centra este artículo, forma parte de los 40 millones de toneladas de residuos cítricos generados anualmente.
De la naranja se pone la atención en el zumo y la pulpa buscando ese elixir que contienen llamado vitamina C. De hecho, el zumo de esta fruta representa hasta el 26 por ciento de la ingesta de vitamina C total en la población infantil, y hasta el 19 por ciento en la población adulta.
Sin embargo ahora es la cáscara la que está centrando ciertos estudios de investigación alimentaria por sus beneficios para las personas que tengan colesterol alto. Además de un estudio pionero en la Universidad de Florida, otros grupos científicos han analizado extractos de cáscara constatando su papel en la reducción del llamado colesterol malo (LDL) en roedores, lo que abre una puerta para este efecto en humanos.
Cómo actúan frente al colesterol
Las cáscaras de naranja contienen diversos componentes bioactivos con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, además de fibra. Para empezar, la hesperidina, un flavonoide antioxidante y antiinflamatorio, que inhibe enzimas involucradas en la síntesis de colesterol. En segundo lugar, contienen polimetoxiflavonas, flavonoides poco comunes que disminuyen triglicéridos y LDL y aumentan el HDL, el llamado colesterol bueno. Y en tercer lugar, actúa la pectina, una fibra soluble que interviene sobre el colesterol a través de su acción intestinal.
Ideas para consumirlas de forma segura
Como con cualquier otro alimentos, es importante no exceder las cantidades adecuadas. En el caso de la naranja pasarse de la raya podría causar malestar gastrointestinal dado su alto contenido en fibra. ¿Cómo podemos incorporarlas a nuestra dieta? Aquí unas pautas básicas:
- Lo mejor es que sean orgánicas: no contienen pesticidas.
- Ralladura o polvo: para añadir a yogures, ensaladas o batidos, o secar las cáscaras para hacer té.
- Suplementos.
Referencias
Hana Lee, Gar Yee Koh, Hanna Lee, Priscila Alves, Wallace Yokoyama, and Yu Wang (2024). Discovery of a Novel Bioactive Compound in Orange Peel Polar Fraction on the Inhibition of Trimethylamine and Trimethylamine N-Oxide through Metabolomics Approaches and In Vitro and In Vivo Assays: Feruloylputrescine Inhibits Trimethylamine via Suppressing cntA/B Enzyme Journal of Agricultural and Food Chemistry, 72 (14), 7870-7881 DOI: 10.1021/acs.jafc.3c09005