Publicado: septiembre 25, 2025, 2:00 pm
El gusano barrenador es un parásito que ataca principalmente al ganado, aunque en ocasiones puntuales también a los humanos. Se encuentra principalmente en América del Sur y el Caribe, pero parece que se está extendiendo. En España, de momento, no se han detectado casos.
Las cosas son diferentes en Estados Unidos, donde el pasado 4 de agosto, registraban el primer caso en humanos en el país, concretamente en una persona en Maryland que había regresado de un viaje a El Salvador poco tiempo antes. Los animales infectados pueden morir en una o dos semanas si no te tratan, también en el caso de los humanos es importante una rápida actuación, por lo que conocer las señales de alerta puede ser clave.
Miasis causada por el gusano barrenador
El gusano barrenador produce una infestación que se conoce como miasis. Las moscas del gusano barrenador se sienten atraídas por las heridas abiertas y ponen ahí sus huevos, las larvas van poco a poco infestando el tejido o la carne viva de los animales de sangre caliente. Se trata de una afección dolorosa y, tal y como señalábamos, afecta principalmente al ganado, pero también se puede ver en aves y, en ocasiones, en humanos.
Las moscas Cochliomyia hominivorax depositan sus huevos y las larvas aparecen pasado un periodo de 12 a 24 horas. Las larvas tienen forma cilíndrica y en uno de sus extremos poseen dos ganchos que emplean para desgarrar el tejido del huésped. Después de alimentarse, las larvas caen al suelo, se entierran y emergen ya convertidas en moscas.
En el caso de los humanos, la enfermedad se adquiere de la misma forma, a través de una herida abierta en la que la mosca deposita los huevos y el contagio es más probable si se está en contacto habitual con el ganado. Del paciente estadounidense se señaló que se había recuperado sin que hubiera evidencia de que otros humanos pudieran haber sido infectados. En general, el tratamiento consiste en retirar las larvas de forma manual y desinfectar las heridas.
Señales a las que prestar atención para evitarlo
Las moscas se sienten atraídas por la nariz, la boca, los ojos, el cordón umbilical de un animal recién nacido o los genitales, pero el foco principal son las heridas. La prevención es clave para protegerse de la miasis, cualquier herida puede convertirse en un foco de atracción para las moscas, incluso las que son tan pequeñas como las picaduras de garrapata.
La clave está en intentar prevenirlas, durmiendo en espacios interiores que tengan mosquiteras, usando repelente de insectos o llevando prendas que dejen poco a la vista, para evitar picaduras. También se recomienda limpiar bien las heridas y llevarlas cubiertas.
Si no se ha podido evitar, también conviene saber a qué síntomas hay que prestar atención porque pueden avisarnos de lo que está pasando. Es importante saber que a medida que las larvas crecen, las lesiones que dejan en la piel son visibles, suelen generar inflamación, enrojecimiento y secreción de pus. Generan una sensación de movimiento y cosquilleo bajo la piel y, conforme las larvas van creciendo, se produce dolor intenso. Si no se actúa con rapidez y eficacia, el gusano barrenador puede provocar infecciones graves, necrosis en el tejido afectado y daño a órganos vitales. También puede causar daños emocionales, porque genera estrés y ansiedad en quien lo padece.
Referencias
Acerca de la miasis por el gusano barrenador del Nuevo Mundo. (s. f.). New World Screwworm. https://www.cdc.gov/new-world-screwworm/es/about/index.html