Publicado: julio 17, 2025, 1:30 am
Una mujer fue despedida de su trabajo con el pretexto de que «no quería» presentarse a su puesto de trabajo cuando, en realidad, «no podía» acudir a las oficinas debido a las graves secuelas que le provocó el COVID-19. Con esta premisa, su hija, Ele, ha llevado a cabo una iniciativa en redes para ayudar a su madre a encontrar empleo «sin que ella se entere».
Para ello, la joven ha creado un perfil en TikTok, @mimadre_mimundo, desde el que pretende dar visibilidad a la historia de su progenitora, la cual, según cuenta, padece desde años síntomas persistentes del llamado síndrome post-Covid y se encuentra en paro. «Tened en cuenta que hay días que no puede ni cepillarse los dientes porque no coordina», destaca.
En su vídeo, que ya supera el millón de visitas, la hija explica que su madre, después de sufrir un despido disciplinario, le «inhabilitaron el paro durante gran parte del tiempo» y que, desde entonces, encuentra dificultades para encontrar un trabajo desde casa, ya que conducir en coche para realizar un trabajo presencial no es una opción para ella.
En este contexto, la joven pide difusión para encontrar una vacante de teletrabajo para su madre, quien, según ella, «hará todo lo que esté en su mano» para llevar a cabo sus tareas. «Ella se esfuerza, es trabajadora, es inteligente», asegura la usuaria de TikTok, incrédula ante la falta de oportunidades laborales que se le presenta a su madre.
En otro orden de cosas, la joven se sincera sobre la depresión de su madre y reclama una mayor concienciación en torno a ciertas enfermedades, como la de su madre, que «no son fáciles de diagnosticar» y que, según cuenta, requieren un largo proceso médico para obtener la discapacidad. «Le dicen que no le pasa nada cuando yo veo a mi madre fatigada, incluso cuando habla, como estoy haciendo yo ahora», indica.
Mientras continúa «en proceso» para aclarar la situación a nivel judicial —»Estamos peleando con la empresa para que digan que ella no podía asistir porque es la verdad»—, la joven subraya el elevado desembolso económico y, por ello, si bien rechaza donaciones, destaca la importancia de «conseguir ayuda». «Me mata no poder hacer nada, pero no me cogen en ningún trabajo. No me queda otra opción que esto», admite.