El jefe del Pentágono visita Puerto Rico en medio de la polémica por las maniobras militares en el Caribe

Publicado: septiembre 8, 2025, 4:30 pm

El secretario de Guerra de EEUU, Pete Hegseth, ha realizado este lunes una visita sorpresa a Puerto Rico para respaldar a las tropas estadounidenses que realizan maniobras en la isla. Su viaje tiene lugar días después de que Washington desplegara al menos diez cazas F-35 en suelo puertorriqueño, en el marco de los últimos movimientos militares de la Administración de Donald Trump para combatir al narcotráfico en América Latina.

Hegseth ha llegado acompañado del jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, el general Dan Caine, quienes han sido recibido en la Base Aérea Muñiz por la gobernadora de Puerto Rico, Jenniffer González. «Agrademos a Trump y a su Administración por reconocer la importancia estratégica de Puerto Rico para la seguridad nacional de Estados Unidos y por su lucha contra los cárteles de la droga y el narcodictador de Nicolás Maduro«, ha dicho González, en referencia al mandatario de Venezuela.

El secretario de Guerra se ha dirigido a los cerca de 300 soldados con un mensaje claro de apoyo de parte de Trump y del Departamento de Guerra en sus misiones, en especial en este enfoque de combatir el narcotráfico en el Caribe. «Los hombres y mujeres en nuestro Departamento serán los mejores preparados«, ha dicho Hegseth, quien ha definido a los militares como «guerreros americanos», según el comunicado del Gobierno de Puerto Rico.

Por su parte, la gobernadora de Puerto Rico ha mostrado a través de redes sociales su apoyo a las políticas de «America First»: «Garantizan la seguridad de nuestras fronteras y combaten las actividades ilícitas para proteger a los ciudadanos americanos y a nuestra nación». «Esta lucha contra el narcotráfico en la que Trump está invirtiendo, aquí que somos la frontera de Estados Unidos en el Caribe, va a posicionar a la isla. Creo que estamos combatiendo por primera vez de raíz el problema, que es atacando de dónde viene la droga», ha declarado.

Sus declaraciones tienen lugar apenas tres días después de que se mostrara «orgullosa» de que el estado asociado a EEUU pudiera apoyar el despliegue de cazas. «Estamos orgullosos de apoyar las operaciones antidrogas de nuestra nación en el Caribe», celebró, si bien el Departamento de Defensa–rebautizado de Guerra- no se pronunció al respecto.

El respaldo de la gobernadora a las políticas de Trump y a las maniobras militares en la isla no es compartido por otros partidos políticos ni por muchos ciudadanos. El Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) exigió el viernes la cancelación «inmediata» de cualquier plan de EEUU para «remilitarizar» a Puerto Rico y presentó una resolución para que la Legislatura haga esta solicitud a Trump y al Congreso estadounidense.

Este mismo domingo, cientos de personas se manifestaron frente a la Base Aérea Muñiz en rechazo a las maniobras del Ejército estadounidense y a una posible reactivación de las antiguas bases militares de la isla.

El estatus político de Puerto Rico como Estado Libre Asociado a EEUU, establecido en 1952, otorga al archipiélago cierto grado de autonomía y un Gobierno y Parlamento locales, pero deja bajo el control de Washington áreas como defensa, fronteras y relaciones diplomáticas.