Publicado: noviembre 8, 2025, 5:30 am
Russell Crowe presenta nueva película: Nuremberg, en la que se pone en la piel del único gran jerarca nazi que fue juzgado, Hermann Göring. Pero los que vean la película notarán un gran cambio en el aspecto del actor neozelandés con respecto a cómo está ahora.
Y es que el intérprete de Wellington ha perdido 27 kilos de peso en el último año. Cuando rodó Nuremberg pesaba 127 y ahora está en 100, un cambio radical para el que no ha recurrido a milagros, ya que principalmente, se debe a que ha reducido al máximo el consumo de alcohol.
«Soy un gran defensor de tomar una copa», explicó esta semana Russell Crowe en el programa de Joe Rogan. «Es parte de mi herencia cultural y, como hombre de clase trabajadora, es mi maldito derecho, Joe», añadió el actor, de 61 años de edad.
Pero Crowe dice que conforme envejece, «uno empieza a aprender ciertas cosas sobre sus capacidades». Crowe no se ha vuelto abstemio, pero ahora «si decido tomar una copa de vino con la cena, será un vino realmente bueno». «Ahora intento no tomar copas de forma casual, tomar una copa por el simple hecho de tomarla», dijo.
Otro factor en su cambio tiene que ver con los tratamientos de sus lesiones. El actor ha recibido inyecciones para tratar diversas dolencias en los hombros y las rodillas, a las que Crowe atribuye la reducción de la inflamación en su cuerpo.
«Creo que ya hemos hablado de la cantidad de lesiones antiguas que arrastro y de la profunda artritis que padezco en los hombros», dice. «Pero ahora, gracias a una ecografía, podemos ver que hace un año tenía grandes bandas de artritis, y ahora han disminuido, probablemente en un 70%. En una zona del hombro derecho, probablemente en un 90%», añade.
En todo caso, Crowe señala que se está tomando esta nueva transformación «poco a poco». «Lo que quiero es que todos estos cambios se conviertan en una situación a largo plazo«, sentencia.
