Publicado: marzo 6, 2025, 9:30 am
Alcohol, agua oxigenada, povidona yodada, clorhexidina … son un clásico de los botiquines caseros para desinfectar pequeñas heridas. Pero, ¿sabes qué indicaciones y limitaciones tiene cada uno? Los denominados antisépticos son sustancias químicas que, al aplicarse sobre la piel, las mucosas o las heridas, eliminan o detienen el crecimiento de gérmenes patógenos evitando que se infecten. Pero desde la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (SEFAP) alertan de que en muchos casos falta información sobre su uso adecuado. «Muchas personas no saben que existen diferentes tipos de antisépticos, cada uno con sus propias indicaciones y limitaciones. Además, es importante seguir las pautas de uso para evitar problemas como la irritación de la piel o la ineficacia del producto debido a una aplicación incorrecta. Por eso, siempre es recomendable leer las instrucciones y, en caso de duda consultar con un profesional sanitario«, explica Blanca Basagoiti, miembro del Comité de Pacientes y Ciudadanía de la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (SEFAP), desde donde han elaborado una infografía explicativa. Entre los antisépticos históricamente más utilizados se encuentran el agua oxigenada , y el alcohol . Desde la Sefap señalan que la primera es irritativa, actúa contra los tejidos sanos de la piel, puede retrasar la cicatrización y tiene un tiempo de acción muy breve. Respecto al alcohol, no se recomienda su uso actualmente para curar heridas (únicamente sobre piel intacta antes de inyecciones, punciones o extracciones). «El alcohol, aunque es un antiséptico de efecto rápido y actúa sobre un gran número de microorganismos, no se recomienda para la desinfección de heridas, porque es muy irritativo y reseca la piel pudiendo dañar los tejidos. Además, es un producto inflamable y se ha de mantener el envase bien cerrado y protegido de las altas temperaturas y de la luz», señala Basagoiti. En el caso de la povidona yodada , cuyos efectos se mantienen un máximo de 3 horas, no se debe usar en recién nacidos,durante el embarazo, la lactancia, en personas con trastornos del tiroides ni en grandes heridas. Desde SEFAP, señalan a la clorhexidina como el antiséptico más recomendable para el tratamiento de la piel sana o erosionada, así como de heridas superficiales y quemaduras leves. «La clorhexidina presenta ciertas ventajas frente a otros antisépticos. Es activa frente múltiples gérmenes patógenos y, al ser trasparente, permite ver bien la evolución de las heridas. Su inicio de acción es rápido, comienza en unos 15-30 segundos y sus efectos se mantienen entre 6 horas y 48 horas . Además, hay pocos casos descritos de irritación de piel y mucosas, su absorción a través de la piel es mínima y, por tanto, produce escasas reacciones sistémicas«, argumenta la farmacéutica de atención primaria. Lo primero es limpiar correctamente la herida o la piel sana con agua y jabón neutro. Después utilizaremos el antiséptico, del que es importante seguir las instrucciones de uso, para no utilizar una cantidad insuficiente o excesiva, y lo dejaremos actuar el tiempo suficiente. Aunque parezca una boviedad, no hay que usar un antiséptico caducado o mezclar distintos antisépticos. No cumplir bien las pautas, apunta la experta, «puede conllevar problemas como la irritación de la piel o la ineficacia del antiséptico». La portavoz de SEFAP destaca además la importancia del correcto almacenamiento de estas sustancias. «Se recomienda no guardar los antisépticos en lugares como la cocina o el baño , ya que son zonas con cambios de temperatura y humedad que pueden degradar el producto y reducir su efectividad. Tampoco se recomienda conservalos de forma que estén expuestos a la luz directa ni al alcance de los niños«, concluye.