Publicado: diciembre 6, 2025, 1:00 pm
Cada vez son más las personas en España que tienen trastornos digestivos vinculados al desequilibrio de la microbiota, algo en lo que no siempre pensamos. Una buena microbiota es fundamental para una buena salud digestiva.
Por eso conviene poner todo de nuestra parte para mantenerla saludable y la dieta es una parte fundamental de ello. A través de los alimentos que seleccionamos podemos reforzar los microorganismos que la forman, logrando que nos sintamos mejor, pero también que tengamos más salud en general, puesto que también influye en el sistema inmunitario.
La dieta ideal para cuidar la microbiota
Un estilo de vida saludable es clave para una microbiota sana, una vida sedentaria nunca es recomendable y este caso no es una excepción, además de intentar hacer ejercicio de manera habitual tampoco es una buena idea el consumo de alcohol y tabaco, de refrescos azucarados o de ultraprocesados. Reducir los niveles de estrés también suele estar entre las cosas que debemos hacer para cuidar nuestra microbiota. Además de todo esto, cuidar nuestra alimentación también es importante.
«No hay una dieta óptima o universal para tu microbiota, pero si la hubiese sería bastante similar a la dieta mediterránea», explica el médico y experto en nutrición Sebastián La Rosa. «Abundante en plantas, especialmente las que son ricas en polifenoles y antioxidantes, con un consumo moderado de pescado, mariscos y aves, y bajo en carnes rojas. Su equilibrio la vuelve una de las más beneficiosas para la salud intestinal».
La propuesta del profesional es una dieta mediterránea ligeramente modificada para lograr los resultados que se buscan, una microbiota saludable. «Tu microbiota puede mejorar y repararse con constancia y buenas elecciones alimenticias», explica, algo que no depende de la edad, cualquier momento es bueno para cambiar hábitos que no nos benefician por otros que son más adecuados para nosotros.
«Esta versión adaptada prioriza el aceite de oliva, los alimentos fermentados, los hongos y las legumbres. También recomienda lácteos de cabra, oveja o búfala, con una proteína más amable para el intestino que la de vaca».
Señales de que tu microbiota podría estar alterada
Cuidar nuestra microbiota es muy importante, porque ayuda a digerir los alimentos, producir vitaminas y regular el metabolismo, además tiene un papel destacado en el sistema inmunológico, porque defiende el cuerpo contra patógenos. No siempre somos conscientes de que nuestra microbiota está alterada, pero hay algunas señales que pueden convertirse en una señal de alerta que nos informan de que algo no va bien y puede ser esto.
Puede haber alteraciones en la microbiota si tenemos con frecuencia la sensación de tener la tripa hinchada, incluso cuando no hemos comido demasiado, también si sentimos una fatiga constante, incluso tras haber descansado bien, es frecuente también tener dificultad para concentrarse o niebla mental. Tener digestiones muy lentas, mal aliento o gases puede ser otra de las señales, así como los problemas en la piel, como acné o dermatitis. Además, es muy frecuente que se manifieste con alteraciones digestivas, como diarrea o estreñimiento, que cada vez nos sienten mal más alimentos.
Todos estos síntomas pueden señalar hacia una microbiota alterada, pero consultar con un especialista será la mejor manera de asegurarnos si es así y si debemos cambiar algunos de nuestros hábitos alimenticios para sentirnos mejor.
Referencias
Del Campo-Moreno, R., Alarcón-Cavero, T., D’Auria, G., Delgado-Palacio, S., & Ferrer-Martínez, M. (2017). Microbiota en la salud humana: técnicas de caracterización y transferencia. Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, 36(4), 241-245. https://doi.org/10.1016/j.eimc.2017.02.007
