Publicado: marzo 6, 2025, 11:00 pm
La defensa del expresidente brasileño Jair Bolsonaro denunció el jueves múltiples irregularidades procesales al responder la acusación presentada en su contra por la Fiscalía por un presunto intento de golpe de Estado para mantenerse en el poder en 2022.
El equipo legal del ultraderechista presentó sus descargos en el último día de plazo fijado por el juez del Supremo Tribunal Federal (STF) a cargo del caso, Alexandre de Moraes, quien después de evaluar los elementos de ambas partes deberá decidir si inicia un juicio.
La fiscalía acusó a mediados de febrero al exmandatario de haber planificado un complot, que finalmente se frustró, para impedir la asunción de Luiz Inácio Lula da Silva, con quien perdió las elecciones en 2022.
El documento presentado este jueves por los abogados de Bolsonaro ante STF cuestiona la competencia de esa corte para juzgar el caso, dijo en la red social X Paulo Cunha Bueno, abogado de Bolsonaro.
El letrado criticó el «cercenamiento» al que ha estado «sometida» la defensa del exmandatario, al no tener acceso completo a los elementos recopilados durante la investigación.
«La defensa resiente y padece la falta de acceso a la totalidad de los elementos recogidos en la investigación, ya que sólo se le facilitan aquellos previamente seleccionados por las autoridades de persecución penal», escribió Bueno.
El abogado afirmó que solo se han incorporado al expediente los elementos que sustentan la acusación, mientras se ocultan otros materiales, «como si correspondiera a la acusación deliberar previamente sobre lo que es o no importante para la defensa».
Calificó el proceso como una «acción penal semisecreta».
La defensa señaló también irregularidades en el acuerdo de colaboración premiada del coronel Mauro Cid, ex mano derecha de Bolsonaro y cuyo testimonio fue clave para la investigación sobre la supuesta trama golpista.
Bolsonaro es acusado junto a 33 colaboradores de «golpe de Estado», «tentativa de abolición violenta del Estado democrático de derecho» y «organización criminal armada», entre otros delitos.
Se expone a una pena de prisión de hasta 40 años por los delitos que se le imputan.
El expresidente, de 69 años, se proclama inocente y dice ser un «perseguido».