Publicado: febrero 28, 2025, 5:15 pm
Desde que Donald Trump asumió su segundo mandato en la Casa Blanca, el clima político en Estados Unidos se ha tornado aún más tenso si cabe, especialmente para la comunidad trans, que, en las últimas semanas, ha visto cómo sus derechos se restringen cada vez más con órdenes como la prohibición de que las mujeres trans compitan en deportes femeninos.
Por ello, no es de extrañar que Kaitlyn Siragusa, o Amouranth, una de las streamers más conocidas del país, se haya convertido en objeto de duras críticas en redes sociales tras atacar en un directo de Twitch a un grupo de activistas de la comunidad LGTBI que reclamaba que el condado de Worcester, situado en el Estado de Massachusetts, se convirtiera en una «ciudad santuario para personas transgénero y de género Diverso».
«Si no quieres que la ciudad sea segura para los transexuales, prepárate para que los transexuales hagan de la ciudad un lugar muy poco seguro para ti», se le oye decir a uno de los activistas. Unas declaraciones que, sin embargo, no sentaron bien a la influencer, quien se encontraba en ese momento reaccionado a un clip del streamer Asmongold, expulsado de Twitch hace unas semanas por incitar al odio contra Palestina.
Tanto es así que, cuando uno de sus seguidores le preguntó en en el chat qué haría con este grupo de personas, la estadounidense detuvo el vídeo para buscar en YouTube unas imágenes de los incendios de Los Ángeles. «Dadle a los locos toda California. Sí, podemos darles California, estoy bien con eso», expresó Amouranth, asintiendo con la cabeza.
Aunque estas declaraciones se hicieron hace un par de semanas, no fue hasta este jueves cuando su nombre quedó envuelto en la polémica. A pesar de las numerosas críticas, la creadora de contenido, lejos de retractarse, se ha reafirmado en sus palabras a través de su cuenta de X (antiguo Twitter), donde acumula más de 3,8 millones de seguidores.
«Supongo que no puedo cuestionar el comportamiento de ‘activistas’ que intentan incitar a la violencia contra su propia comunidad sin ser acusada de odiarles», ha comenzado diciendo la influencer. «Pero, de nuevo, tampoco supongo que las acciones de unos pocos específicos sean indicativas del conjunto. ¡Pero gracias por hacerme tendencia!», ha añadido.
En una publicación posterior, la creadora de contenido se ha posicionado en contra de los «bandos», alegando que ella «simplemente» dice las cosas como las ve. «No tengo una agenda ni un plan maestro para atraer a otro grupo demográfico», ha explicado, en alusión a los comentarios negativos sobre su supuesta evolución ideológica.
