Publicado: agosto 6, 2025, 4:30 pm
Cristian Suescun ha concedido este miércoles una entrevista en exclusiva a TardeAR, donde no ha dudado en arremeter contra su cuñado, Kiko Jiménez, en medio de la tensa disputa que mantiene tanto con él como con su hermana, Sofía Suescun.
En primer lugar, Cristian ha querido responder a Jiménez, que había insinuado que él vive a costa de los ingresos de Sofía. «¿Kiko Jiménez qué trabajo ha tenido aparte de hablar de personas en la televisión, aparte de meter mierda en la televisión de gente? O sea, no ha tenido un trabajo digno en su vida», ha manifestado muy indignado en una llamada de teléfono con Leticia Requejo.
Y, en lugar de detenerse ahí, se ha referido a Kiko en severos términos presentándolo como alguien que esconde maldad bajo una apariencia afable: «Es un tío muy perverso, que se sienta ahí, echa su sonrisita, tuerce la pierna y parece bueno y con su sonrisita al fin del mundo y con su pelito».
Por último, el joven también ha recordado un momento particularmente doloroso que le tocó vivir en las pasadas Navidades. «Me dejaron a mí tirado el día de Nochebuena y me dijeron que se iban a Linares a las tres de la tarde. El día 24 me quedé yo solo llorando aquí en mi casa. Mi hermana traga con todo, traga con todo», ha lamentado.
La madre de Kiko sale en su defensa
Después de estas explosivas declaraciones, el mismo espacio de Telecinco ha emitido la réplica de Carmen Jiménez, la madre de Kiko, quien ha salido en defensa de su hijo y de Sofía Suescun ante los señalamientos públicos de Cristian.
«Cristian quiere dinero fácil, los ha vendido bien. Es muy fuerte lo que ha dicho. Ahora se agarra a lo que puede hacer daño. Hay que ser muy bajuno para hacer eso«, ha sostenido Carmen. «Yo vivo de mi trabajo, no vivo de vender a mi hijo y a mi nuera… ni a mi familia. Eso es asqueroso. Yo sufro mucho y no me puedo callar», ha apostillado.
Carmen tampoco ha pasado la difícil convivencia entre la pareja y Cristian: «¿Qué persona aguanta en su casa a un hermano todo el día agobiando? ¿Qué persona aguanta a un cuñado? Todo el día tocándose los huevos. ¿Qué persona? Es que no podían más […] Llevaban un año que no podían más con él. Y mi hijo no tiene culpa de nada, si es un santo bendito».
