Contra la extorsión - Venezuela
Registro  /  Login

Otro sitio más de Gerente.com


Contra la extorsión

Publicado: julio 7, 2025, 11:00 pm

El día de hoy se presentó la estrategia nacional contra la extorsión, que se enfocará en disminuir las extorsiones en ocho estados prioritarios: Ciudad de México, Estado de México, Michoacán, Guerrero, Nuevo León, Jalisco y Veracruz, seleccionados como espacios con mayor complejidad en esta materia. Dentro de la estrategia, señalan la relevancia de la aprobación de la Ley del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia, mediante la cual podrán robustecer las investigaciones para ampliar la capacidad de desmantelamiento de redes criminales, detectar a los generadores de violencia, generar una coordinación con las autoridades, de la mano de unidades antiextorsión, atención multidisciplinaria y equipo de trabajo especializado y el fortalecimiento de capacidades institucionales. En la estrategia de combate a la extorsión, destacan la congelación de cuentas bancarias, la geolocalización, campañas de concientización, capacitación de funcionarios; entre otros aspectos. Nadie puede negar que esto sea importante, incluyendo la prioridad de atender la intervención de llamadas extorsivas y presenciales. 

Por otra parte, hemos pasado décadas detectando que uno de los graves problemas de la extorsión parte de las redes de contubernio que se gestan a nivel local, ya que este delito se desarrolla principalmente en zonas muy específicas en donde las áreas de oportunidad no son improvisadas sino todo lo contrario. En este sentido, sumamos los reclusorios y centros de detención que son verdaderos call-centers de organización y ejecución de las extorsiones, de la mano de redes bien organizadas -así, hay poco espacio para la improvisación de este delito, más cuando los objetivos son claros y específicos para los grupos criminales-. En este sentido, cuando uno se enfrenta al delito de extorsión, valdría la pena no solo pensarlo de forma reactiva -cuando ya sucedió la amenaza o se ejecutó algún tipo de violencia, como son la quema de negocios, el levantamiento de algún miembro de la víctima, la intimidación en otras cadenas de suministro, o incluso la muerte-.

La extorsión es atroz, ya que merma el patrimonio, pero la vida de las víctimas esta a disposición del nivel de profesionalización, capacidad de intimidación, contubernio que tengan los grupos criminales y la capacidad de reacción de las autoridades para intervenir. Así, el poder congelar cuentas bancarias, tecnología y crear protocolos de actuación es muy positivo, pero valdría la pena pensar más en una perspectiva proactiva frente al delito de extorsión. En este sentido, tenemos claro que si la extorsión parte de una localidad, y que los grupos estudian sus objetivos prioritarios -empresas, microempresas, espacios de interés económico, negocios específicos que requieren de ciclos específicos, como es el caso de la siembra de productos, trasportación, o la ubicación de zonas comerciales extractivas-, es importante considerar un mapa de futuros-posibles de riesgo que puedan generar interés a las dinámicas de grupos locales criminales, los cuales son más dañinos y predatorios.

Por otra parte, el delito de extorsión se alimenta de información, de observación, de vigilancia y ejecución. En este sentido, las operaciones que culminen con éxito parten de dos factores determinantes: información y contubernio. Si estos dos factores no se atienden, de la mano de un mapa de riesgos que pueda localizar posibles escenarios de riesgo e interés criminal, estaremos condenados al destiempo de la prevención de riesgos y amenazas. En el mismo sentido, las investigaciones y detenciones estratégicas son fundamentales, pero no pueden lograrse sin un acercamiento entre las autoridades locales y los sectores empresariales de los municipios, que puedan trabajar en conjunto -lo cual requiere de una reconstrucción de la confianza de las autoridades locales- de la mano de canales de denuncia seguros para las víctimas.

Por otra parte, aproximarnos a una estrategia preventiva al mismo tiempo que proactiva, quizá pudiera considerar dos momentos en el delito de extorsión: el que está ocurriendo y el que va a ocurrir. Esto ayudaría mucho a observar y comprender el delito de extorsión desde una visión focalizada a dos tiempos, y por otra parte determinar las posibles acciones extorsivas que puedan desarrollarse en corto y mediano plazo. Un mapeo de las empresas y su localización, los giros económicos locales -siembra, cosecha, traslados de mercancía-, los trabajos de proximidad de las autoridades con los sectores económicos que pudieran ser atractivos para la criminalidad, la incorporación de instituciones bancarias, el compartir información entre víctimas de extorsión de distintos sectores, entre otros aspectos, puede contribuir de una forma más activa a la contención de la extorsión. Entender los procesos de vulnerabilidad y puntos ciegos en la lógica económica local, pudiera ser de gran ayuda para prevenir que algo ocurra, de la mano por supuesto de procesos de investigación, desarticulación y judicialización de casos. Esperemos que todo salga bien con la apuesta de la estrategia en corto y mediano plazo…

Related Articles