Publicado: marzo 7, 2025, 3:31 pm
La Justicia de Reino Unido ha declarado este viernes culpables de espiar para Rusia a tres ciudadanos búlgaros detenidos en septiembre de 2023 en lo que la Policía británica ha catalogado ya como «una de las mayores» operaciones de Inteligencia extranjera. Se trata de Vanya Gaberova, Katrin Ivanova y Tihomir Ivanchev , todos ellos de entre 30 y 39 años e integrantes de un grupo que, entre 2020 y 2023, vigilaron en secreto a periodistas y una base militar estadounidense mientras, según recoge la BBC. Todos ellos han sido condenados por conspiración para espiar , mientras que en el caso de Ivanova se le ha incluido una condena por posesión de múltiples documentos de identidad falsos. Los búlgaros trabajaban para su compatriota Orlin Roussev, que dirigía la red de espionaje desde una antigua casa de huéspedes en la ciudad de Great Yarmouth, ubicada el condado de Norfolk, en el extremo oriental de Reino Unido. Durante el registro de este edificio, la Policía encontró numerosos aparates y equipos de espionaje, incluidas cámaras ocultas en corbatas, una cámara escondida en una piedra falsa e incluso gafas que contenían equipos de grabación. Entre las pertenencias también había varios peluches de los Minions que tenían cámaras espía. Según las investigaciones de las autoridades, el jefe de la banda, el búlgaro Orlin Roussev, los consideraba como sus ‘minions’, los compañeros amarillos del malvado villano Gru en la franquicia cinematográfica infantil ‘Mi villano favorito’. Durante todo este tipo, los búlgaros se ocultaron realizando trabajos como esteticistas, trabajador sanitario y decorador . El comandante de la Policía Metropolitana, Dominic Murphy, ha reconocido que los métodos del grupo no son los típicos de «novelas de espías». Antes de la decisión judicial de este viernes, tanto Roussev como otro búlgaro más reconocieron durante el juicio haber actuado como espías; mientras que un sexto acusado reconoció los hechos antes incluso de que se abriera la causa. Dos de los principales objetivos de este grupo eran los periodistas Christo Grozev y Roman Dobtojotov , quienes investigaban el papel de Rusia en los ataques con agentes nerviosos contra el líder opositor ruso Alexei Navalni en 2020 y contra Sergei Skripal en 2018.