Era un secreto a voces. De hecho, dentro de la comunidad LGTBQ+ ya era bastante conocida su relación con la modelo Kate Harrison, a quien se le vinculó por primera vez hace seis años. Sin embargo, públicamente no había hecho ninguna declaración al respecto hasta ahora, que Chloë Grace Moretz ha salido del armario ante todos sus seguidores.
A través de una publicación en su Instagram en la que aparece una chapa con las palabras «I Voted Early» [«Yo ya he votado»] sobre su pierna, la intérprete de 27 años ha dado a conocer su homosexualidad, dando su apoyo a Kamala Harris y a las políticas de la candidata demócrata en las elecciones de este próximo martes.
Asimismo, la actriz ha expresado su preocupación por la posible victoria de Donald Trump, dado que se ha mostrado tajantemente en contra de las políticas antiabortistas del expresidente republicano.
«Yo ya he votado y lo he hecho por Kamala Harris. Hay mucho en juego en estas elecciones. Creo que ningún gobierno tiene ningún derecho sobre mi cuerpo como mujer, y que las decisiones sobre mi cuerpo deben venir SOLO [sic] de mí y de mis médicos», ha comenzado diciendo Grace Moretz.
«Y eso, para nosotras, quien lo va a defender es Kamala Harris. Creo en la necesidad de unas seguridades legales que protejan a la comunidad LGBTQ+ como mujer homosexual, porque necesitamos cuidados en este país y tener acceso a la atención que precisamos y merecemos», ha añadido.
«Así que… ¿Habéis votado ya? ¡Haced todos planes para ir a vuestro lugar de votación con vuestros amigos!», ha declarado la intérprete de Kick-Ass, Malditos vecinos 2 o Pasajero oculto antes de promocionar una web oficial para ir a votar.
Chloé Grace Moretz, a pesar de hablar públicamente por primera vez, es habitual de las marchas a favor de las mujeres homosexuales, siendo la última a la que asistió, a principios de este año, la más conocida. Asimismo, también ha participado en películas como La (des)educación de Cameron Post, en la que interpretó a una joven lesbiana en una película sobre un campamento de terapia de conversión a principios de los años 90.
Según la actriz, la cinta, que ganó la mayor distinción en el Festival de Sundance de 2018, le había hablado de una forma muy personal, pues ella creció en un pueblo con una importante comunidad cristiana en Georgia teniendo dos hermanos homosexuales, que tuvieron que lidiar con «mucho odio hacia sí mismos» por ser lo que son.