Publicado: junio 28, 2025, 6:00 am
El periodista y defensor de derechos humanos Carlos Julio Rojas pasará en prisión otro Día del Periodista. Rojas, quien cumplió 14 meses encarcelado en el Helicoide el pasado 15 de junio, enfrenta un proceso lleno de incertidumbre, sin derecho a la defensa y sin un proceso legal claro. Recientemente estuvo incomunicado y con prohibición de visitas.
“La detención arbitraria de Carlos Julio Rojas es una forma de silenciar la disidencia”, explica Edgar Cárdenas, secretario general del Colegio Nacional de Periodistas seccional (CNP) Caracas.
Rojas es directivo del CNP Caracas. Para el gremio periodístico, su detención tiene consecuencias muy graves, ya que “es un periodista menos, y eso implica menos información y más censura; aunque no fue detenido por su labor profesional, sí está detenido por el ejercicio de la libertad de expresión”.
El comunicador, quien ha sido calificado como preso de conciencia por Amnistía Internacional y citado reiteradamente por el alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, está en un limbo legal. Como enfatiza el doctor Joel García, su abogado defensor que el tribunal no acepta juramentar, “se ha intentado la designación de la defensa de confianza, pero es el propio tribunal el que, lejos de garantizarle sus derechos, se los impide”.
Hay lagunas legales que no entienden sus defensores y tampoco su familia. “El tribunal que tiene, o tenía su causa, es el Cuarto de Control con competencia en Terrorismo, y decimos que puede ser que lo tenía porque ya ha transcurrido tiempo suficiente para haber realizado la audiencia preliminar y pasarlo a la fase de juicio, pero no contando con esa información, ignoramos su estatus actualmente”, aclara García.
Patrón de persecución
La de Carlos Julio Rojas es una detención arbitraria que, a juicio de Édgar Cárdenas, obedece a un patrón. “Son detenciones arbitrarias, sin ninguna razón, sin orden judicial. Son detenidos de manera irregular” con la idea de silenciar “a quienes ejercen la profesión de periodista y el derecho ciudadano a informar y a estar informado”. Cárdenas refirió que en el país hay un clima de hostilidad para el ejercicio del periodismo, con “una escalada de agresiones a periodistas y medios”.
El dirigente gremial aclara que en 90 % de los casos de trabajadores de la prensa detenidos “no se sigue el debido proceso, son detenidos de forma arbitraria, los problemas de salud no son atendidos oportunamente, y un ejemplo de esa situación es el propio Carlos Julio Rojas”.
Nota de prensa
