Publicado: junio 17, 2025, 10:30 am
Que la defensa es una prioridad absoluta para la UE ha quedado clarísimo y en el marco de la ronda de paquetes omnibús para modernizar el bloque, la Comisión Europea ha presentado este martes un conjunto de medidas destinadas a agilizar las inversiones y la producción en materia de defensa, en respuesta a los desafíos de seguridad actuales. Estas acciones están en línea con el Libro Blanco para la Preparación en Defensa Europea 2030, y buscan reforzar «la capacidad de respuesta de la Unión Europea ante posibles conflictos de alta intensidad». Además, quiere hacer todo esto contando con Ucrania como un país miembro más aunque no lo sea.
En esa batería, Bruselas propone reducir trámites burocráticos, facilitar el acceso a financiación de la UE y ofrecer mayor previsibilidad al sector. Entre las principales medidas se incluye un régimen acelerado de permisos para proyectos de defensa, reduciendo el plazo de aprobación a 60 días y estableciendo los llamados puntos únicos de contacto nacionales para apoyar a la industria.
«La única manera de garantizar la paz europea es asegurarnos de que estamos preparados para defendernos con credibilidad y rapidez. Con este paquete, presentamos propuestas ambiciosas para reducir la burocracia y facilitar las inversiones en defensa por valor de 800.000 millones de euros que los Estados miembros deben acometer urgentemente para alcanzar la preparación europea para la defensa en 2030«, ha explicado el comisario europeo de Defensa, Andrius Kubilius, recordando además el plan Reamar Europa, presentado hace meses por la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen.
Además, se simplificarán los procedimientos del Fondo Europeo de Defensa (EDF), especialmente para facilitar la participación de entidades ucranianas. El plan también busca agilizar las compras conjuntas y elevar los umbrales contractuales para facilitar las transferencias transfronterizas de productos de defensa. Asimismo, se aclarará la aplicación de normativas comunitarias existentes, como las de competencia o medio ambiente, y se ajustarán las regulaciones químicas a las necesidades del sector.
Por último, se mejorará el acceso a financiación mediante la simplificación de los criterios de elegibilidad del programa InvestEU, la emisión de orientaciones sobre inversiones sostenibles en defensa y una aclaración sobre el tratamiento de armas prohibidas dentro del marco de financiación sostenible. En conjunto, estas medidas pretenden fortalecer la capacidad de acción rápida de la UE, facilitar la coordinación entre países y asegurar que su industria de defensa pueda responder con velocidad y escala ante nuevas amenazas.
Fuentes comunitarias explicaron que durante el proceso de elaboración de esta batería, se realizó una consulta pública de un mes, que recibió más de 200 respuestas de gobiernos, industrias y asociaciones. También se llevaron a cabo diálogos estratégicos con la industria de defensa para ajustar las propuestas. El énfasis central es en procesos más rápidos, simples y ágiles, especialmente en contrataciones y compras conjuntas entre Estados.
También se propone una «licencia única» para facilitar el traslado de productos de defensa entre Estados miembros, ya que las autorizaciones nacionales actuales generan retrasos de hasta un año y medio, recordaron las fuentes. Esta medida ahorraría tiempo significativo en toda la cadena de suministro y permitiría una mayor agilidad para la industria europea, añaden desde Bruselas.
«Estamos enviando una clara señal política: Europa se toma en serio la defensa y la creación de una preparación creíble. Estamos eliminando la burocracia para ayudar a los Estados miembros y a la industria a actuar con mayor rapidez, invertir de forma más inteligente y reforzar nuestra disuasión colectiva. Se trata de convertir la ambición de la UE en capacidad real», reaccionó desde Estrasburgo la vicepresidenta de la Comisión, Hena Virkkunen, en la misma línea que el comisario de Economía, Vladis Dombrovskis. «Este paquete propone liberar la abrumadora fuerza económica de Europa, eliminando barreras internas, reduciendo la burocracia y clarificando las normas, de modo que pueda desarrollarse rápida, eficiente y eficazmente una capacidad industrial y tecnológica de defensa auténticamente europea», expuso, elogiando también es una manera de «reforzar el mercado único».