Publicado: noviembre 24, 2025, 2:00 am
Levantarse con el vientre plano y ver cómo nos vamos hinchando a lo largo del día es algo bastante frecuente en España y, a pesar de que puede haber muchas causas, expertos como la psiconeuroinmunóloga Blanca Gómez han querido hacer hincapié en algunas causas que no siempre tenemos en cuenta.
Sentirse bien es importante y un vientre hinchado puede resultar muy molesto, por eso encontrar los motivos que llevan a que esto suceda es un buen primer paso, el siguiente es encontrar la forma de que no pase más, poniendo remedio haciendo algunos pequeños cambios en nuestro estilo de vida o rutinas.
Los motivos más frecuentes para la inflamación abdominal
Resignarse a sentirse hinchado e incómodo no es lo más adecuado, lo mejor es ser consciente de que existe un problema y buscar una posible solución para así poderse sentir bien de nuevo. Hay ocasiones en las que es necesario poner en marcha un tratamiento médico, pero no siempre se trata de SIBO, hipoclorhidria o falta de enzimas pancreáticas, de las que también ha hablado la psiconeuroinmunóloga Blanca Gómez con anterioridad en sus redes sociales.
«¿Cuántas personas conoces que se levantan con la barriga plana y a lo largo del día se van hinchando hasta sentir disconfort extremo?», comienza su vídeo Gómez. «Suele pasar por tres motivos: comes alimentos que fermentan demasiado, tu sistema digestivo no está funcionando como debería o tienes el sistema nervioso simpático demasiado activado e inhibe la digestión». En este caso, ella pone el foco en aquellos que tienen una digestión lenta, una alimentación poco adecuada o un exceso de estrés, por lo que la solución sería revisar nuestra alimentación, favorecer en la medida de lo posible la digestión y reducir los niveles de estrés.
El estrés y las emociones pueden influir en el funcionamiento de nuestro sistema digestivo, afectando a la motilidad intestinal, lo que lo ralentiza, pero también puede aumentar la acidez y el reflujo, favorecer la aparición del síndrome del intestino irritable (SII) o generar inflamación y provocar enfermedades digestivas crónicas, sobre todo en el caso del estrés crónico.
«Muchas personas simplemente necesitan un pequeño apoyo para recuperar la funcionalidad del aparato digestivo y sentir ese alivio», explica, mientras señala que una forma de sentirse mejor puede ser seguir unos sencillos consejos, como evitar los cereales y las legumbres (así como esos alimentos que sabemos que nos hinchan), apostar durante diez días por alimentos cocinados y comer solo cuando se tiene hambre, lo que ayuda a espaciar las comidas. También seguir algunos de los consejos habituales de la fitoterapia.
Fitoterapia: cómo ayuda a evitar la inflamación abdominal
La fitoterapia es el uso de productos de origen vegetal con finalidades terapéuticas, es decir, para aliviar, calmar o reducir dolores o malestares físicos. La fitoterapia sería una ayuda, un complemento, y en ningún caso sustituiría a un tratamiento médico pautado por un profesional. En este caso, Blanca Gómez aboga por el uso de determinadas especias a la hora de preparar los alimentos que vamos a comer. Destaca tres de ellas:
- Tomillo, porque “calma espasmos y reduce gases”
- Orégano, que “ayuda en sobre crecimientos bacterianos”
- Semillas de pomelo, resultan de gran utilidad porque “modulan frente a hongos y levaduras”.
Una pequeña ayuda a la hora de alejarnos de alimentos y preparaciones con las que no conseguimos los resultados que esperamos y sustituirlos por otros métodos e ingredientes que pueden ayudarnos a sentirnos mejor y más saludables.
Referencias
De Smet, P. A. (1995). Health Risks of Herbal Remedies. Drug Safety, 13(2), 81-93. https://doi.org/10.2165/00002018-199513020-00003
