Publicado: febrero 12, 2025, 7:15 am
Cuando una influencer comienza a alcanzar cierto nivel de popularidad en redes sociales es muy probable que una agencia de marketing y comunicación se muestre interesada en trabajar con ella. Esto es lo que le pasó a Astrid Millán, si bien, en su caso, la oferta de representación por parte de la empresa incluía una insólita condición que no se esperaba.
Aunque ha evitado dar detalles al respecto, la creadora de contenido, quien actualmente cuenta con 1,2 millones de seguidores en TikTok, ha relatado cómo afrontó, en ese momento, la inesperada propuesta de negocio que recibió para futuras colaboraciones y que, finalmente, terminó declinando.
Lo ha hecho, asimismo, en el pódcast de La influencia de Nacho Pla, donde la barcelonesa ha abordado, entre otros asuntos, la dinámica de su relación con su actual pareja, quien aparece en muchos de sus vídeos. Sin embargo, lo más sorprendente de la entrevista llegó cuando el conductor del espacio, Nacho Pla, le preguntó acerca de la mencionada petición:
«Una agencia te dijo que para contratarte tenías que dejar de llevar escotes», le preguntó el presentador, a lo que Astrid no dudó en responder con rotundidad: «Sí, cosa que obviamente no acepté. No me pareció tampoco ético». Una inesperada revelación a la que la tiktoker agregó que, más allá de modificar su vestimenta, la estrategia perseguía el objetivo de «hacer mi perfil más blanco, para que le gustase más a las marcas».
Pero no solo eso, ya que, a su juicio, también radicaba en la búsqueda de ampliar su nicho de mercado, atrayendo a una audiencia femenina. «Sí que es verdad que yo antes tenía un público que era más masculino y ahora sí que hay muchas mujeres entre mi público», confesó, reflexionado sobre su propia evolución en redes sociales.
A pesar de todo, Astrid se mostró conforme respecto a su decisión. «No voy a dejar de ser yo o mis gustos para acceder a una agencia», añadió la influencer, si bien admitió que era consciente de que, al no ajustarse a un perfil más neutro, se le iban a cerrar muchas puertas. «Es como muy guay vivir todo esto, lo que te puede dar la agencia, pero no estaba preparada para obedecer a eso», sentenció.