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15 chalets que redefinen el equilibrio entre lujo y sostenibilidad

Publicado: febrero 23, 2025, 9:49 am

Mirasierra es un enclave sereno al norte de Madrid que guarda entre sus calles una historia de aspiraciones nobles. Fundada en 1950 bajo el nombre de Colonia Mirasierra, esta urbanización conjugaba el privilegio de vivir rodeado de naturaleza con la proximidad a una capital vibrante. Su denominación proviene de las vistas despejadas hacia la Sierra de Guadarrama, horizonte majestuoso que parece vigilar el día a día de los residentes. Los primeros habitantes de este sueño urbanístico fueron diplomáticos y cónsules, figuras que buscaban refugio en la tranquilidad. Fue a partir de los años ochenta cuando Mirasierra consolidó su carácter de exclusividad. Allí se erigieron edificaciones de lujo que terminaron de perfilar su imagen como una de las áreas residenciales más deseadas de Madrid. Hoy, las calles de Mirasierra, flanqueadas por árboles centenarios y jardines cuidados, ofrecen una atmósfera de sosiego difícil de igualar. El barrio, a pesar de su aparente retiro del bullicio, se encuentra estratégicamente conectado. Esta dualidad (tranquilidad y conexión) es uno de los principales motivos por los que tantas familias eligen Mirasierra como su hogar. Es en este marco idílico en el que encontramos la promoción de moda: Pico Milano es una propuesta residencial que eleva los estándares del buen vivir de la mano de la inmobiliaria GILMAR. Se trata de un conjunto de 15 villas diseñadas con una exquisita atención al detalle y distribuidas en parcelas que van de los 750 a los 950 metros cuadrados. Sus líneas rectas y cubiertas planas dialogan con una fachada diseñada para el ahorro energético, en la que el blanco del revestimiento SATE se alterna con listones de madera sintética que añaden calidez. El resultado es una estética depurada que armoniza con el entorno sin renunciar a la innovación. Cada villa dispone de tres niveles destinados a diferentes usos sociales y privados. En la planta principal se desarrollan los espacios comunes: un amplio salón, cocina de diseño totalmente equipada con electrodomésticos de primeras marcas y áreas pensadas para el disfrute cotidiano. La planta superior alberga cuatro dormitorios en formato suite, cada uno con acceso directo a terrazas que ofrecen vistas privilegiadas a los jardines y a la montaña. Las barandillas de cristal refuerzan esa sensación de apertura hacia el exterior, integrando luz y paisaje en cada rincón. La experiencia de habitar estas viviendas va más allá de lo visible. La tecnología avanzada de domótica, integrada en el diseño, permite a los residentes controlar desde su smartphone aspectos como la climatización o la seguridad. El sistema de aerotermia garantiza un ambiente agradable durante todo el año, proporcionando calefacción mediante suelo radiante en invierno y refrigeración refrescante en verano. Termostatos en cada estancia aseguran un control preciso de la temperatura según las preferencias de cada miembro de la familia. Laura Pérez Maestro, directora de comunicación de GILMAR, destaca que «un hogar es mucho más que una vivienda: es el escenario de grandes momentos y el reflejo de un estilo de vida. Pico Milano ofrece no solo lujo y sofisticación, sino también la armonía perfecta entre naturaleza, diseño y tecnología avanzada». La sostenibilidad es otro de los pilares de esta promoción. Las viviendas de Pico Milano apuestan por la sostenibilidad sin sacrificar ni en el confort ni en el lujo, sino que los redefine, colocando al bienestar del planeta y de sus habitantes en el centro del diseño. En los exteriores, cada parcela cuenta con una piscina de diseño personalizado. Algunas presentan un borde tipo ‘infinity’ que se funde visualmente con el horizonte, mientras otras adoptan el concepto de playa, con zonas poco profundas ideales para el relax. Estos espacios, pensados para el ocio familiar, se completan con jardines que amplían las posibilidades de recreo y descanso al aire libre. «Pico Milano no es sólo una colección de viviendas; es un homenaje al arte de habitar. En cada detalle, desde la elección de materiales hasta la distribución de espacios, se percibe un respeto profundo por el entorno y por las necesidades de quienes lo habitarán», añade la experta de GILMAR.

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