Publicado: noviembre 8, 2017, 10:00 am
El Banco Central de Venezuela no renovó el swap (empeño) de 90 toneladas de oro monetario de las reservas internacionales que firmó el año pasado con el Deutsche Bank, el cual implicó un préstamo de 1,2 millardos de dólares en efectivo, por lo que el banco alemán decidió ejecutar la fianza y quedarse con todo el metal.
La transacción original implicó una valoración de 1,7 millardos de dólares del oro monetario, la cual incluía una garantía para Venezuela de 400 millones de dólares que el BCV recibió al vencerse el canje y que, según fuentes ligadas al instituto emisor, están siendo utilizadas para la amortización de los compromisos de deuda externa cuyos vencimientos se registran en los últimos meses de este año.
Entre octubre y noviembre de este año los compromisos de pago entre las obligaciones de Petróleos de Venezuela y la República sumaban 3,5 millardos de dólares. La semana pasada se pagaron con retraso 842 millones de dólares de capital del bono Pdvsa 2020 y 41 millones de dólares del cupón (tasa de interés) del Pdvsa 2037.
Los restantes 2,6 millardos de dólares incluyen la cancelación de 1,12 millardos de dólares del vencimiento del bono de la petrolera estatal 2017, que fue la parte que no pudo canjearse en la operación impulsada por el ex presidente de Pdvsa Eulogio del Pino, con los tenedores de este papel en 2016.
En el punto de cuenta que entregaron Giordani y Merentes al entonces presidente de la República, Hugo Chávez, para solicitar la repatriación del oro, se informaba que las reservas en oro ascendían a 365 toneladas y agregaba que en el exterior había 211,35 toneladas equivalentes a 11 millardos de dólares a la cotización de la época) y en las bóvedas del BCV 154,47 toneladas, 7,2 millardos de dólares al valor del momento.