Publicado: diciembre 6, 2025, 4:30 am
Nacido en Chicago en 1959, John Paul Salapatek, conocido como John Franklin, saltó a la fama en 1984 al interpretar a Isaac Chroner en la versión cinematográfica de Los chicos del maíz, adaptación homónima (e igualmente estremecedor) del relato de Stephen King.
Aunque era ya un adulto —tenía unos veintitrés años durante el rodaje—, su estatura, de algo más de un metro y cincuenta centímetros, consecuencia de un déficit en la hormona del crecimiento, le hacía parecer casi un adolescente, lo que le encajó perfectamente para interpretar a ese carismático y espeluznante predicador infantil.
Pero el de Isaac no fue su único papel memorable. En 1991 interpretó al peculiar Primo Cosa en la película de La familia Addams, y repetiría el papel en su secuela de 1993. El actor también pasó por papeles esporádicos en series de televisión y películas de géneros como terror, fantasía o una mezcla de ambas como, por ejemplo, siendo la voz de Chucky en Muñeco diabólico (1988).
Tras una década moviéndose como actor de secundarios, cameos y doblajes y después de varios altibajos, en 1999 regresó al universo que le dio la fama: protagonizó y coescribió junto a su primo, Tim Sulka, la película Los chicos del maíz 666: el regreso de Isaac.
Sin embargo, su carrera en el cine comenzó a diluirse. Según él mismo admitió, un cúmulo de pérdidas personales (amistades, agentes) le hicieron replantearse el sentido de aquella vida. «¿Qué legado quiero dejar?», se preguntó. Así que decidió dejar los rodajes y, en 2003, colgó definitivamente las cámaras para convertirse en profesor de inglés, teatro y escritura de guiones en el instituto Golden Valley High School, en Santa Clarita, California, donde lo llamaban cariñosamente Señor Sal.
Durante años, su labor como docente, combinada con talleres de teatro guion, parece haberle dado un nuevo propósito: «Muchos estudiantes me decían que venían por mis clases, que yo les inspiraba para escribir o actuar».
La parada, no obstante, no fue definitiva. Al terminar el curso 2015-2016, Franklin anunció que se retiraba de la enseñanza para volver a la actuación y a la escritura. Desde entonces, ha participado en cortos de terror, apariciones puntuales en cine y acude a convenciones de fans del cine de terror, donde el público sigue recordándolo con cariño como su terrorífico «niño-profeta del maíz».
Además, dijo también estar trabajando en proyectos literarios. Concretamente, en una novela para jóvenes adultos. Aunque la fama de Isaac no le dio una carrera de primera línea, sí le aseguró un hueco especial en la memoria colectiva, suficiente para poder permitirse reinventarse sin perder nunca de vista su línea creativa.
