Publicado: octubre 30, 2025, 3:30 am
El pasado martes se vivió la que denominan ya como la intervención policial más letal de la historia de Río de Janeiro, que acabó con más de un centenar de muertos, cerca de 90 detenidos y más de 100 armas de fuego incautadas. Fueron 2.500 agentes de las fuerzas de seguridad de Río los que llevaron a cabo la operación ‘Contención’, que tenía como objetivo frenar y combatir la expansión territorial del Comando Vermelho (Comando Rojo), una de las bandas criminales organizadas más poderosas de Brasil, y, por tanto, detener a sus líderes.
La megaoperación se llevó a cabo en las favelas de Penha y Alemão, uno de los sectores más pobres y violentos de Río, consideradas bases estratégicas para el tráfico de armas y drogas. La respuesta por parte del Comando Vermelho, según citan los medios locales, fue el montaje de barricadas para frenar la entrada policial, mientras que la Policía indica que lanzaron bombas desde drones mientras huían a otras zonas. Los agentes lograron arrestar a Thiago do Nascimento Mendes, alias Belao do Qutungo, uno de sus líderes de su historia más reciente.
Así nació el Comando Vermelho en Brasil
El Comando Vermelho nació en la década de 1970 en una prisión de Ilha Grande, mientras Brasil vivía la dictadura de 1964-1985. Presos comunes con presos políticos y guerrilleros de izquierdas crearon una alianza inusual, un grupo de autoprotección frente a la violencia ejercida por los guardias de la cárcel. El conocimiento de organización y guerrilla y la experiencia delictiva se unieron para después, en las calles, convertirse en una banda criminal y organizada que se dedicaba a los asaltos y robos bancarios.
Pese a la contención de las autoridades penitenciarias, que empezaron a separar a líderes y repartirlos por diferentes prisiones, la banda consiguió expandirse, haciendo de Río su base. Fue en esta ciudad brasileña donde se asentó su tráfico de drogas, principalmente la cocaína, que conseguían gracias a una alianza con cárteles de Colombia.
Según ha pasado el tiempo, el Comando Vermelho ha expandido su expediente delictivo con tráfico de armas, extorsiones, robos a bancos e incluso, la minería ilegal de oro cerca de la región amazónica. Pese a los operativos e investigaciones por parte de los agentes, la banda se mantiene como una de las más peligrosas y poderosas de Brasil, compartiendo rivalidad con el Primer Comando Capital (PCC). Se estima que en 2020 tenía unos 30.000 miembros en todo el país, según Insight Crime.
Los rivales del Comando Vermelho
El principal rival del Comando Vermelho (CV) es el Primer Comando Capital (PCC), un grupo violento y organizado que goza también de gran poder en Brasil. Este movimiento tiene su origen en São Paulo, en la década de los 90 y también nació dentro de un sistema penitenciario. De hecho, el CV fue la inspiración para este nuevo grupo criminal, lo que les llevó durante años a ser incluso grupos en alianza.
Pero como dice el refrán, el alumno supera al maestro, por lo que el PCC consiguió a través de la financiación ilegal, también con el tráfico de drogas, convertirse en el grupo criminal que lucha ahora contra el Comando Vermelho para conseguir controlar sus territorios y rutas de tráfico. Mientras tanto, otras facciones enemigas del CV serían grupo locales como el Terceiro Comando Puro (TCP), Amigos dos Amigos (ADA), así como otras milicias.
