Publicado: octubre 13, 2025, 4:30 pm
La medicina es capaz de dar una solución a muchas parejas que sufren infertilidad. Pero no asà para los hombres con azoospermia no obstructiva (NOA), una enfermedad genética en la que la producción de esperma se estanca. Hasta ahora, los tratamientos son limitados, lo que deja a miles de personas afectadas sin opciones viables para concebir biológicamente. Pero un equipo de la Universidad de Osaka (Japón) presenta en la revista ‘ PNAS ‘ un enfoque pionero que ha logrado revertir esta condición en ratones. Tal y como detallan en su estudio, la administración de ARNm a través de nanopartÃculas lipÃdicas (LNP) dirigidas a genes testiculares especÃficos ha logrado restaurar la producción de esperma y lograron el nacimiento de descendencia viable en un modelo de ratón. El tratamiento produjo descendencia sana y fértil y abre la puerta hacia terapias para esta causa de infertilidad basadas en genes. El estudio usó ratones con infertilidad (NOA) causada por un gen defectuoso que detenÃa la formación de espermatozoides. Los cientÃficos inyectaron nanopartÃculas con ARNm en los testÃculos, logrando que el mensaje llegara a más de la mitad de los túbulos donde se forman los espermatozoides, y durara unos 5 dÃas. Para que el ARNm actuara solo en las células germinales (las que producen espermatozoides), añadieron una señal que evitaba su acción en otras células. En ratones con una mutación en el gen Pdha2, el tratamiento permitió que la formación de espermatozoides continuara: aparecieron espermátidas a las 2 semanas y espermatozoides a las 3. Estos espermatozoides se usaron para fecundar óvulos, obteniendo 26 crÃas sanas y fértiles de 117 embriones. Este estudio ofrece un enfoque innovador para el tratamiento de la infertilidad masculina causada por defectos genéticos. Al restaurar la espermatogénesis en un modelo murino con azoospermia no obstructiva mediante la administración de ARNm mediada por nanopartÃculas lipÃdicas (LNP), se introduce una alternativa más segura y no integradora a las terapias génicas tradicionales , lo que brinda esperanza para los casos de infertilidad intratable en humanos. Los autores concluyen que estos resultados muestran cómo se puede recuperar la espermatogénesis y sientan las bases para la investigación aplicada en el tratamiento de ciertas formas de infertilidad masculina. Otra de las razones de la infertilidad masculina es la incapacidad de que los espermatozoides a nadar bien y no alcancen el óvulo para su fecundación. Pero en otro estudio de la Universidad de Osaka , también publicado en ‘ PNAS ‘, se desvela un componente clave del «interruptor» que mantiene la señal de movimiento fuerte, lo que ofrece una nueva y prometedora vÃa tanto para el diagnóstico como para el tratamiento. Cuando este interruptor falla, los espermatozoides se ralentizan y la fecundación falla . Al restaurar esta señal en el laboratorio, el equipo rescató la natación y logró nacimientos sanos en ratones. Para que los espermatozoides fecunden con éxito un óvulo, deben poder nadar, un proceso impulsado por su cola. Este movimiento es activado por una molécula de señalización esencial llamada AMP cÃclico (AMPc). Si bien se sabÃa que una enzima llamada adenilil ciclasa soluble (sAC) produce AMPc dentro del espermatozoide, el mecanismo preciso que controla la estabilidad y la función de esta enzima seguÃa siendo en gran medida un misterio. Los cientÃficos estudiaron una proteÃna llamada TMEM217, presente solo en los testÃculos. Cuando eliminaron este gen en ratones, los machos quedaron infértiles porque sus espermatozoides no se movÃan. Al tratar estos espermatozoides con una molécula que imita el AMPc, recuperaron su movimiento y pudieron fecundar óvulos, produciendo crÃas sanas. Este descubrimiento ofrece una nueva diana para el diagnóstico de casos inexplicables de infertilidad masculina.