Publicado: octubre 10, 2025, 12:30 pm
Hace unas semanas, la influencer Carolina Moura sorprendió a todos al anunciar que se había mudado a Nueva York junto a su pareja. Aunque, de momento, a juzgar por sus últimas publicaciones, parece que esta nueva etapa está resultando muy positiva, hay un aspecto de su vida en Estados Unidos que no termina de convencerle en absoluto: la alimentación.
Tanto es así que la que fuera tentadora de La isla de las tentaciones ha compartido un vídeo en el que no solo admite que lleva una temporada «comiendo mal», sino que, en sus propias palabras, la comida de EEUU le «está matando». «Hay cosas que como aquí que no comería en España, eso es así. Pero los tiros no van por ahí», indicó Moura.
En su vídeo, la influencer señaló que en el país americano los alimentos se procesan de una manera distinta a nuestro país hasta el punto de que, en el marco europeo, supondría una práctica «ilegal», ya que podría no ser recomendable para la salud. Para ilustrarlo, Carolina mencionó el pollo, un producto que considera «básico» en cualquier dieta.
Así, según ella misma explicó, la industria alimentaria de EEUU habría optado por «abaratar costes» con el fin de satisfacer la elevada demanda interna derivada de su amplia población. En el caso del pollo, esto se traduciría en el uso del cloro para desinfectarlo y eliminar la presencia de salmonela u otras bacterias.
Por su parte, la carne de cerdo tampoco se queda atrás, ya que a las crías de este animal se les suministra artificialmente la hormona ractopamina, un aditivo para promover el crecimiento muscular magro, que, según ella, «está prohibida en más de 160 países». Además, la influencer resalta la abundante oferta de productos ultraprocesados, los cuales, a simple vista, se observa que «no son saludables».
Con este panorama, Moura sostiene que la única alternativa disponible pasa por una dieta «orgánica, a pesar de que no esté al alcance de todos los bolsillos. «Aquí la compra es carísima. A lo mejor te gastas 200 dólares en una bolsa, pero hay que gastarse más para poder comer orgánico», sentenció.
Aun así, añadió, la alimentación que lleva en Estados Unidos habría comenzado a pasarle factura en términos de salud. «Yo me encuentro regular», comentó Moura. «Tengo las defensas bajísimas, me han salido orzuelos… No me encuentro bien al cien por cien».