Publicado: septiembre 27, 2025, 4:00 am
Son varios los motivos que pueden causar el fenómeno de dormir con la boca abierta, desde una mala postura hasta una congestión nasal y, en algunos casos, por una afección grave o crónica. Además, tal y como señala una experta en ortodoncia invisible y estética, esta costumbre podría ser negativa para la salud de los dientes ya que podría generar, entre otras cosas, la aparición de las temidas caries, un daño del cual, más del 90% de la población adulta en nuestro país padece, según datos publicados en el año 2022 por el Consejo General de Dentistas en España.
La experta que habla sobre este tema en un vídeo publicado en sus redes sociales es Lucía Palma, quien también señala el papel fundamental que juega la saliva para proteger la salud bucal y que, en el caso de que se seque, sería perjudicial por los motivos que explicamos a continuación.
Qué es la saliva
La saliva es un líquido acuoso e incoloro que se produce por las glándulas salivales presentes en la boca, según explica la Clínica de la Universidad de Navarra en un artículo de su página web. Señalan que, aparte de agua, contiene otras sustancias y anticuerpos con funciones beneficiosas para la digestión, la defensa de los microorganismos y la protección de las superficies bucales.
A través de la saliva, es posible detectar patologías como el cáncer oral o la diabetes, de acuerdo con ciertas investigaciones que se han hecho sobre ello. Aparte, tener sequedad bucal o xerostomía, es decir, poca producción salival, podría ser síntoma de situaciones como estrés.
Dormir con la boca abierta podría secar la saliva
Según Lucía Palma, «si duermes con la boca abierta podrías estar dañando tus dientes», porque provocaría la aparición de caries y sequedad de la saliva, que lo describe como un líquido que actúa como protector natural en estos músculos duros durante las horas de sueño.
«Sin saliva, el entorno de tu boca se vuelve más ácido y ese ambiente ácido favorece la aparición de caries», explica Palma. A su vez, «el esmalte se debilita, las encías se secan y puedes despertarte con sensibilidad. No es solo un hábito incómodo, puede tener consecuencias reales si no se corrige a tiempo», advierte la experta en ortodoncia invisible.
Como solución, propone intentar respirar por la nariz durante las horas de sueño, evitar los ambientes muy secos o con calefacción muy directa y, en el caso de sentir la boca seca o los dientes sensibles tras despertarnos, «coméntaselo a tu dentista».