Publicado: septiembre 18, 2025, 1:30 pm
Bajo el lema de «Unir el Reino» (Unite the Kingdom), más de 100.000 personas abarrotaron el pasado sábado, día 13 de septiembre, las calles de Londres en una manifestación convocada por el líder de extrema derecha Tommy Robinson para protestar y entonar distintos cánticos en contra del presunto aumento de la inmigración ilegal.
Esta marcha, que se saldó con 25 detenidos y 26 policías heridos y contó con la participación vía videollamada de Elon Musk, ha situado en el punto de mira a Ada Lluch, la influencer catalana de 26 años que lideró una de las protestas con un discurso de ocho minutos de duración ante miles de «patriotas del Reino Unido y del mundo», en sus propias palabras.
Lluch, quien se describe a sí misma como «una chica con sentido común», se declara en sus redes sociales como activista de la ideología «anti-woke» y se posiciona abiertamente en contra del islam y de la «libertad de expresión restringida». En su discurso, la influencer dedicó unas palabras a la viuda de Charlie Kirk y abogó por la falta de identidad de las naciones europeas, amenazadas, presuntamente, por la «inmigración ilegal».
«Haremos Europa, Europa otra vez», decía Ada, como representante de España, alineándose con el discurso de extrema derecha y marcadamente xenófobo que imperaba en las protestas. A pesar de ello, la joven, que cuenta con cerca de 40.000 seguidores en su perfil de Instagram, sostiene que no se enmarca dentro de «ninguna etiqueta», según señaló a El País.
Aun así, no cabe duda de que sus declaraciones públicas dejan entrever la simpatía que le despiertan algunas figuras políticos como Robinson en Reino Unido, Santiago Abascal en nuestro país, y Donald Trump, en Estados Unidos, con quienes Ada se ha dejado fotografiar varias veces. «Me invitan a muchos eventos diferentes por estar activa en política. Intento asistir siempre a lo que puedo», comentó al citado medio.
Aunque, de momento, descarta irrumpir en política, su gran presencia en redes sociales y su trato con figuras de la órbita ultraderecha la llevaron a codearse en varias ocasiones con el presidente de Estados Unidos, quien, incluso, propició que su ahora exmarido, Joey Mannarino, le pidiese matrimonio.
La influencer, originaria de Tartasa, residió en EEUU entre los años 2023 y 2024 y, en este contexto, su relación con Mannarino, estratega político vinculado a candidatos conservadores, se erigió como un nexo con Trump. A día de hoy, sin embargo, reside «la mayor parte del año» en Europa.
