Publicado: septiembre 12, 2025, 6:00 am
El consumo de edulcorantes artificiales bajos en calorÃas o sin ellas podrÃa acelerar el deterioro cognitivo, según ha encontrado un reciente estudio a gran escala. No sólo eso, sino que el efecto podrÃa ser más acusado en adultos de mediana edad y en personas con diabetes.
Ya existÃan evidencias que apuntaban a que esta clase de productos podÃan perjudicar la salud humana de diversas formas, incluyendo un incremento en la probabilidad de padecer determinados problemas crónicos de salud como diabetes, enfermedad cardÃaca o depresión. No obstante, esta es la primera vez que se estudia de este modo el efecto de los edulcorantes sobre el funcionamiento del cerebro.
Deterioro de la función cognitiva
El estudio, dirigido por la Dra. Claudia Kimie Suemoto de la Universidad de São Paulo (Brasil) y publicado en la revista especializada Neurology, tomó los datos de 12.772 adultos participantes en el Estudio Longitudinal Brasileño de Salud del Adulto. A estos voluntarios, entre otras cuestiones, se les realizaron cuestionarios cada cuatro años durante tres olas (2008-2010, 2012-2014, y 2017-2019) en los que se abordaba su consumo de diferentes alimentos. De este modo, se estimó su consumo habitual diario de diferentes edulcorantes.
EspecÃficamente, se tuvieron en cuenta siete edulcorantes bajos en calorÃas o sin ellas (aspartamo, sacarina, acesulfamo K, eritritol, sorbitol, xilitol y tagatosa, el único de origen natural). Según el consumo, se dividió a la muestra en terciles (tres grupos con el mismo número de integrantes) en los que, en el grupo más bajo, el consumo medio de edulcorantes fue de 20mg/dÃa y en el superior de 191mg/dÃa (equivalente a una lata de refresco light).
De este modo, encontraron que las personas que consumÃan más edulcorantes mostraban un deterioro más pronunciado de las habilidades cognitivas, especialmente la memoria y la fluidez verbal, hasta un 62% más rápido. Aproximadamente, esta diferencia equivalÃa a envejecer 1,6 años más.
Hay que destacar que la edad actuaba en este caso como un factor clave, ya que el aumento del envejecimiento cognitivo se notaba especialmente en personas menores de 60 años pero no era tan notable en los mayores de esa edad. Además, un análisis pormenorizado posterior encontró que el deterioro se incrementaba con el consumo habitual de todos los edulcorantes salvo la tagatosa. Por último, el efecto era más pronunciado en las personas diabéticas.
La importancia de la moderación
Aunque el estudio tiene algunas limitaciones importantes que deben ser tenidas en cuenta (como no incluir cualquier tipo de edulcorante artificial o apoyarse en el reporte del consumo por los propios participantes), ofrece evidencias que apoyan la importancia de la moderación en el consumo de estos productos.
Especialmente, opinan los autores, esto es importante a la hora de asesorar a aquellos pacientes que de por sà tienen un riesgo mayor de padecer demencia o diabetes.
Los investigadores esperan que sus conclusiones no inciten el pánico entre los consumidores, pero sà que esperan que, especialmente a la luz de los demás estudios que también han advertido de posibles riesgos para la salud de los edulcorantes artificiales, estos hallazgos lleven a moderar y limitar el uso de estos productos optando en su lugar, siempre que sea posible, por alternativas naturales como la fruta, la miel o las especias.
Referencias
Natalia Gomes Gonçalves, Euridice Martinez-Steele, Paulo A. Lotufo, Isabela Benseno, Alessandra C. Goulart, Sandhi Maria Barreto, Luana Giatti, Carolina Perim de Faria, Maria del Carmen Bisi Molina, Paulo Caramelli, Dirce Maria Marchioni & Claudia Kimie Suemoto. Association Between Consumption of Low- and No-Calorie Artificial Sweeteners and Cognitive Decline. Neurology (2025). DOI: https://doi.org/10.1212/WNL.0000000000214023