Publicado: agosto 27, 2025, 2:00 pm
«Necesito desconectar». Que levante la mano quien no haya escuchado, o pronunciado, estas dos palabras en un momento de la vorágine diaria durante el año. Más allá de ser algo ‘bueno’ para la salud física, cogerse unos días de descanso es fundamental para mantener la salud mental a salvo, y también para prevenir enfermedades cardiovasculares. Las vacaciones son un paréntesis en la rutina que, según los expertos, no son una opción sino que deberían ser una obligación.
Una vez queda claro que la desconexión es clave para todas las personas, una investigación de la Universidad finlandesa de Tampere establece exactamente el número de días mínimo para que el proceso de desconexión surta efecto. Menos de esos días, es imposible conseguir los beneficios de la desconexión… y más… no necesariamente aumentan las ventajas.
El estudio sobre las vacaciones y sus beneficios en la salud
En el estudio mencionado, los investigadores analizaron como media unas vacaciones de 14 días, y los procesos psicológicos asociados a ellas. Cualquier periodo vacacional es necesario, pero con esta investigación se pretendió establecer exactamente cuántos días son los ‘perfectos’ para conseguir el máximo beneficio. Pues bien, la conclusión es que lo ideal son 8 días de vacaciones: menos, no son suficientes para desconectar, y más, se ha demostrado que no consiguen mejorar los resultados del octavo día.
La salud y el bienestar de las personas que formaron parte del estudio encontraron su punto álgido el octavo día de vacaciones, regresando de manera muy rápida al nivel inicial dentro de la primera semana de haber reanudado el trabajo. Como parámetros para considerar esa salud y ese bienestar se consideraron el disfrute referido, el buen descanso, el sueño reparador y el placer derivado de las actividades que se desempeñaban durante el tiempo de ocio.
La conclusión es que la salud y el bienestar mejoraron durante las vacaciones largas de verano, aunque su efecto positivo es bastante efímero. Así pues, «ocho días son suficientes para conseguir descansar y desconectar, constatando que a partir de ellos, más días no aportan beneficios añadidos».
¿Qué sucede en nuestra salud física y mental cuando disfrutamos de 8 días de vacaciones?
Los expertos del estudio finlandés observaron que la carga de estrés descendía significativamente cuando la persona cogía 8 días de vacaciones. Durante los días anteriores, el proceso iba cogiendo forma, pero no se podía considerar que hubiera conseguido desconectar de los mails, y todo lo que el trabajo supone en su organización mental. Es decir, que los primeros días de vacaciones, aún no hemos ‘olvidado’ el día a día en la rutina laboral.
Pero quizá lo más curioso del asunto es que, el periodo comprendido entre el octavo día, y el decimocuarto, no mostraba mejoras en el estrés y el bienestar significativas. Por lo tanto, los expertos recomiendan como imprescindible e ‘ideal’ el patrón vacacional de 8 a 10 días. Más tiempo no tiene beneficios comprobados, y además podría suponer un problema en cuanto a la recuperación de la rutinas, y la vuelta se haría mucho más dura.
Probablemente, y según se desprende de la investigación, lo ideal sería poder disfrutar de 8 días cada trimestre, para relajarnos, encontrar ese nivel álgido de relajación, y volver al trabajo con ilusión, recuperados, habiendo dormido bien y con un estado de bienestar que nos ayude a afrontar la siguiente etapa con fuerza e ilusión.
Referencias
Bloom, Jessica, Geurts, Sabine A.E. Geurts, Kompier, Michiel A.J. ‘Vacation (after-) effects on employee health and well-being, and the role of vacation activities, experiences and sleep’. Journal of Happiness Studies 14, 613–633 (2013). Consultado online en https://link.springer.com/article/ el 8 de agosto de 2025.