Publicado: agosto 15, 2025, 8:30 am
El libro El Auge y la Caída de la Casa de York, escrita por el historiador Andrew Lownie, ha puesto sobre la mesa los distintos escándalos en los que se ha visto envuelto Andrés de Inglaterra, hermano del rey Carlos.
El libro aborda, entre otras cosas, las relaciones de Andrés con su madre, Isabel II, quien lo consideraba su favorito y a quien se retrata como cómplice -en cierta medida- de sus fechorías.
El polémico libro es fruto de cuatro años de investigación y cientos de entrevistas a miembros cercanos a la corona británica.
La biografía remueve el capítulo más oscuro que ha acechado a la corona británica en la última etapa: el caso Epstein. No solo toca esta polémica amistad con el pedófilo estadounidense, también otras como su relación con inversores extranjeros de cuestionada reputación. Andrew Lownie, en declaraciones a la revista Paris Match, dice que el libro, en realidad, trata sobre la corrupción financiera dentro de la familia real inglesa.
El Príncipe Andrés habría recibido importantes comisiones al ejercer de intermediario real encubierto. En el libro, una fuente expone una comisión que asciende a la cantidad de 5 millones de dólares, supuestamente recibida por el presidente de Kazajistán, Nursultán Nazarbáyev.
La información, siempre según este libro, fue reportada a la soberana a un secretario privado a través de un miembro de la inteligencia británica. Este alertó de que se trataba de un hecho muy perjudicial. «No hizo nada, no le interesaba. Y pensé: ‘Parece que la Reina antepone la monarquía a su familia, que es una mujer de gran integridad’. Y ahí está, cómplice de su hijo», ha afirmado el autor.
Según Lownie, el Príncipe Andrés pudo continuar con sus negocios, muchos de ellos controvertidos, debido a que su madre hizo la vista gorda. El autor señala que su progenitora no solo le apoyó de forma pasiva, también recibió en Windsor a personajes que ha calificado de «dudoso» perfil. «Siempre he tenido el mayor respeto por la Reina, pero eso se ha visto debilitado. Así que sí, siempre supe que Andrés y Sarah (Fergusson, su exmujer) eran malas personas, pero no me di cuenta de que actuaban con el apoyo de su familia».
Describe al Príncipe Andrés como una persona muy arrogante y egoísta. En sus 450 páginas se repasan amoríos fugaces en sus 65 años y un comportamiento muy cuestionable hacia el personal que trabaja en palacio.
A pesar de su vínculo estrecho, Isabel II se vio obligada a despojarle de sus títulos y deberes reales tras la polémica entrevista que ofreció en la BBC sobre el asunto Epstein. En la misma intentaba defenderse de las acusaciones de Virginia Giuffre, una de las implicadas, que se suicidó hace unos meses. Tras el fallecimiento de su madre, el 8 de septiembre de 2022, su hermano Carlos aún lo apartó más de sus funciones oficiales.