Publicado: julio 24, 2025, 8:00 pm
Supongamos por un momento que nos encontramos en una selva densa, impenetrable, en el corazón de América del Sur hace más de cuatro siglos. Los árboles impiden el paso del sol, la humedad es abrumadora y el aire está impregnado de misteriosos aromas de plantas y flores que solo existen allí. En esa profundidad los habitantes nativos conocen desde hace siglos los secretos que la naturaleza ha dispuesto sigilosamente, secretos que los forasteros descubrirán apenas de manera accidental, pero que cambiarán para siempre la historia de la medicina y, de paso, el rumbo mismo de la humanidad. Esta es la historia -mezcla de mito, azar y ciencia- del descubrimiento de la quinina como remedio contra la malaria, una de esas… Ver Más