Publicado: julio 23, 2025, 1:30 am
Guerra abierta entre un local de Barcelona y la drag queen Kika Lorace tras un show este fin de semana que acabó cancelado, según el dueño de la sala, por «faltas de respeto y falta de profesionalidad» por parte de la artista.
Este fin de semana, La Sastrería, un local gay de la capital catalana, pidió perdón en sus redes «por la repentina cancelación» de la actuación de Kika Lorace «por motivos totalmente ajenos a la sala«.
«Desde La Sastrería cortamos cualquier tipo de colaboración directa o indirecta con la artista«, explicaron y alegaron que, en cuatro años, nunca se habían «topado con una situación tan incómoda para el local y los camareros». «No respondemos a faltas de respeto y falta de profesionalidad», aseguraron.
Además, sostuvieron que Kika Lorace ya hizo un espectáculo el pasado 15 de junio y «salió a la perfección», por lo que no ven justificado que ella dijera que su show no se hizo «por problemas técnicos de la sala».
En otro story, Daniel, dueño de La Sastrería, se dirigió directamente a la drag queen y dijo que nadie le «va a mandar a la mierda delante de 90 clientes» y su equipo después de haberlos «gritado y hablado como parece que está acostumbrada a hacer».
«Veinte años de carrera no te dan derecho a faltarme al respeto, ridiculizarme delante de la gente y darle la vuelta a un tema que es simplemente resumible: falta de profesionalidad y tus ‘migrañas», escribió el empresario, que acusó a la artista de no llegar puntual al trabajo para «realizar una mínima prueba de sonido y controlar el local».
«Si el ego, la soberbia y otros factores te han hecho no querer realizar el show es tu problema«, apostilló Daniel en su publicación.
La respuesta de Kika Lorace
Kika Lorace contesta al dueño del local que le acusa de haberse llevado 3mil euros y de que iba puestisima en el local. Ella lo niega todo. pic.twitter.com/SDdrfce20U
— Ani Marrash💥 (@AniMarrashh) July 20, 2025
Tras lo ocurrido, Kika Lorace hizo un directo en Instagram en el que se pronunció sobre todo y desmintió haberse metido con nadie. «A mí miedo no me da nadie», declaró, dirigiéndose al dueño de La Sastrería. «Cuando un sitio no me gusta, yo decido y hago lo que me apetece«.
La drag queen leyó los comentarios que le dejaba la gente, entre los que había gente que aseguró que el dueño la había acusado de llevarse 3.000 euros en su última actuación y que iba drogada, cosas que desmintió tajantemente.
«Yo el otro día vine, eran 76 entradas que vendí a 12 euros»; «No me drogo y, si me drogo, poco problema tiene él. Lo que tiene que hacer es cuidar su local, su sonido», respondió para defender su versión.
Sin embargo, el propio Daniel desmintió estas afirmaciones que le dijeron a Kika Lorace, pues continuó pronunciándose y opinó que ha de rodearse de gente que le diga verdades y no le «meta mierda con mentiras». Aun así, sí que reiteró su crítica a la drag, compartió una conversación en Instagram en la que le insultó y animó a todo el mundo a dejar de aplaudir su actitud o «absorber algo de fama», pues consideraba que su forma de proceder era «denunciable» y «vergonzosa».
Y es que otras artistas, como Pitita, ganadora de Drag Race España 3, salieron en defensa de Kika Lorace y acusaron a La Sastrería de ser «un cuadro patético» y un mal lugar para trabajar, algo a lo que el local contestó diciendo que era una «desagradecida» porque antes de ser famosa le dieron muchísima visibilidad y trabajaba allí semanalmente.
Además, la sala barcelonesa continuó publicando stories de otras drags que los estaban apoyando, como Alexandra del Raval, La Escándalo, Venus Hartman, Nayah Carter, La Jacinta y Vida Queen, entre otras.