Publicado: junio 26, 2025, 2:30 am
Los deportes de combate se caracterizan por ser competiciones donde los atletas se amoldan a una categoría de peso. Y para llegar a ella, existe una ceremonia, casi un ritual extremo, que se denomina el recorte de peso , consistente en ir perdiendo kilos durante semanas y quitarse varios más el último día mediante una sudoración extrema. Y, por supuesto, el caso de Ilia Topuria no es una excepción. El Matador encara el combate más importante de su carrera para la creación de un legado, para continuar agrandando su leyenda, pues su triunfo ante Alexander Volkanovski fue el gran golpe en la mesa para cambiar el devenir de las artes marciales mixtas en nuestro país. Sea como fuere, Topuria tendrá la oportunidad este sábado de convertirse en campeón mundial del peso ligero , lo que supondría conquistar una segunda categoría dentro de la mayor liga del mundo. Aunque competir en el peso ligero supondrá tener que pesar en la báscula este viernes 155 libras (70,3 kilos), esto es, 10 libras menos que cuando se proclamó campeón del mundo ante Volkanovski en el peso pluma (145 libras, 65,8 kilos), el haber aumentado masa muscular implica que seguirá teniendo que perder muchos kilos para poder hacer oficial el pleito durante el pesaje oficial. Por eso, antes de la pelea tiene que ajustar al máximo, hasta el punto de que no es suficiente con una estricta dieta. Para ello, después de haber perdido gradualmente varios kilos, este jueves tendrá que deshidratarse para perder otros tantos más y llegar a los 70,3 que marca el límite de la categoría cuando hay un título mundial en juego . «Es como secar una uva, pesarla, y volver a hidratarla» , explica a ABC MMA el nutricionista David Rojas, que trabaja con otros atletas de la talla de Aleksandre Topuria, Joel Álvarez o Dani Bárez, todos ellos peleadores de la UFC. «La primera fase de deshidratación es la reducción calórica. El atleta parte de un peso y tiene unas semanas para el evento. Con una condición física y un porcentaje de grasa concreto, el deportista reduce su aportación calórica como haría cualquier persona que quiere bajar de peso: comer un poco menos por día y el organismo va quemando grasa. Eso no es suficiente, porque mucha parte del peso está en el glucógeno, que es el hidrato de carbono que consumimos y que se almacena en el hígado y los músculos. Ese glucógeno arrastra su propio peso 3 veces en agua y sales minerales como sodio. Nuestros músculos son como garrafas de agua », explica el preparador. Ese glucógeno es el que Topuria debe reducir al máximo. En total, se estima que entre la reducción calórica y un proceso de deshidratación rápido y extremo, el peleador puede perder entre 6 y 7 kilos de golpe. Normalmente, los peleadores llegan a la semana del evento con unos 4 o 5 kilos por encima de su peso máximo requerido, aunque pueden ser algunos más, incluso el doble, dependiendo de la categoría y la particularidad de cada uno. Respecto a la manera de quedarse, como explica Rojas, como una uva seca, el mecanismo es la pérdida de agua, que se puede realizar mediante la orina o la sudoración. Y eso es lo que realizan los luchadores como Topuria en el día previo al pesaje. «El proceso de deshidratación comienza quitando los hidratos de carbono para que el cuerpo deje de almacenar ese glucógeno y empiece a quemar el que tiene dentro. Una vez quitado este, aún queda mucha agua en el cuerpo y ese se tiene que retirar por un proceso de sudoración», explica el nutricionista valenciano. Así, los peleadores, incluido Topuria, suelen forrarse con plásticos o trajes saunas y entrenar con ellos . Por temperatura, el cuerpo empieza a sudar. Por ello, deben hacer diferentes ‘asaltos’ de sauna, con periodos sudando un tiempo específico dentro de la misma, antes de salir y cubrirse de toallas y mantas para seguir sudando aún con la temperatura alta. Otra manera es entrar en una bañera con agua por encima de 40ºC para sudar. Se debe pasar con agua con 36-38ºC hasta ir subiendo hasta los 40-42, y permanecer en la bañera unos minutos. Se va controlando y liberando sudor, hasta que la temperatura sea agobiante para el atleta, salir y cubrirse con una toalla o manta para seguir sudando. Estas operaciones, especialmente las de la sauna y la de la bañera, se deben repetir hasta que se cubra el peso necesario a reducir pero solo durante unas horas: el riesgo de un posible paro cardíaco por deshidratación extrema es alto. « No se puede estar deshidratado muchas horas. Sabiendo que no es algo positivo, ni bueno, ni saludable, los expertos en recorte de peso minimizamos el tiempo que el deportista está deshidratado », concluye David Rojas. Después de pasar este proceso extremo de pérdida de peso, Topuria se subirá a la báscula de las instalaciones de la UFC en Las Vegas y podrá, así, confirmar su pelea por el título mundial del peso ligero de la UFC ante Charles Oliveira.
