Publicado: junio 25, 2025, 11:30 am
Cuidar la piel va más allá de la estética, por eso es importante no dejarse llevar por modas virales y confiar en el criterio de profesionales. Gema Herrerías , farmacéutica, nutricionista y divulgadora con más de 20 años de experiencia, es una de esas profesionales que comparte sus conocimientos científicos a través de las redes sociales y de libros, como su nuevo ‘Código Piel’. En este manual, pensado para profesionales y usuarios, la experta desmiente muchos mitos sobre la cosmética y ofrece las claves para que cada persona pueda conocer su piel y elegir los productos adecuados en cada momento. Para saber qué productos elegir para cuidar la piel, hay que responder en primer lugar a la pregunta: ¿cuál es tu tipo de piel? La clasificación ha cambiado con los años, y Gema Herrerías considera que « la piel normal no existe, que la piel mixta es simplemente una variante de la piel grasa y que la sensibilidad está directamente relacionada con el estado de la función barrera». La profesional explica en ‘Código Piel’ que «el objetivo no es solo identificar qué tipo de piel tienes, sino entender cómo cambia con el tiempo y cómo puedes adaptarte a sus necesidades de manera eficaz y respetuosa». Las variables en las que hay que fijarse, a la hora de elegir la rutina, son el tipo de piel (seca o grasa), el estado de la función barrera (sensible, con deshidratración o resistente) y las prioridades en cada momento (manchas, piel muy seca, arrugas, imperfecciones…). Algo que hay que grabarse a fuego es que la piel va cambiando y que el estilo de vida (la alimentación, el sueño, la exposición solar, el estrés…) juega un papel clave . Sin olvidar, los cambios hormonales que sufre la mujer, en periodos como el embarazo, la menopausia o cuando tiene el ciclo menstrual. Para Gema Herrerías una de las cuestiones esenciales en el cuidado de la piel es la función barrera. «La función barrera actúa como la primera línea de defensa frente a agresiones externas, proporcionando protección inmunitaria, biológica, química y física». La experta está convencida de que « mantener su equilibrio es la clave del éxito en el cuidado de la piel y en la prevención del envejecimiento a todos los niveles, incluso inmunitario. Una función barrera cutánea sana permite conservar la funcionalidad de la piel, optimizar su capacidad de regeneración y reforzar su respuesta ante el estrés ambiental». La piel resistente tiene una función barrera sana, pero la piel sensible y la piel deshidratada presentan alteraciones que habrá que tratar. Para encontrar los productos de belleza que le van a tu piel, después de saber si tienes una piel grasa o seca, si tu función barrera está bien o tiene alguna debilidad, hay que centrarse en prioridades. La farmacéutica recomienda « consultar con un dermatólogo cuando haya patologías cutáneas». Las imperfecciones más comunes de la piel incluyen el acné, la rosácea y la dermatitis seborreica . Otra de las prioridades del cuidado de la piel suelen ser las manchas , entre las que hay que distinguir el melasma, el lentigo solar, el eritema postinflamatorio… Arrugas y flacidez son los principales signos de la edad. Finalmente, otra problema es la piel seca que puede estar asociada a problemas como la xerosis o la dermatitis atópica. Una vez que ya hemos identificado cómo es nuestra piel y qué nos preocupa, llega el momento de elegir la rutina cosmética. «La cosmética funciona, pero no todos los cosméticos son iguales», asegura Gema Herrerías. La experta, además, hace hinchapié en que « la eficacia de un ingrediente por separado no garantiza el resultado del producto final . Hay que valorar la fórmula completa, confiar en marcas que demuestren la eficacia de sus cosméticos a través de ensayos in vitro y en vivo». ¿Cuáles son los ingredientes que sí funcionan? En primer lugar: los antioxidantes (vitamina C, vitamina E, niacinamida, azeloglicina). La farmacéutica asegura que «además de proteger frente al daño oxidativo (exposición solara, contaminación, estrés…), muchos antioxidantes también tienen acción antiinflamatoria, despigmentante y antiedad». En segundo lugar, los reparadores de la función barrera , porque la experta asegura «aunque muchas veces se piensa que beber más agua mejora directamente la hidratación de la piel, no hay evidencia científica que lo confirme ». Por eso, en la rutina no pueden faltar ceramidas, ácidos grasos, colesterol, ácido hialurónico, ácido poliglutámico, escualano, pantenol o centella asiática. En tercer lugar, la protección solar. «El mejor cosmético antiedad es el protector solar: previene arrugas, manchas, flacidez y protege del cáncer de piel. No existe el callo solar , solo el daño acumulado. Esto es lo que dice la ciencia, lo demás son solo opiniones», así de tajante se muestra Gema Herrerías en su manual ‘Código Piel’. Otros activos que funcionan son los despigmentantes (ácido tranexámico, ácido azelaico, vitamina K óxido, extracto de regaliz) para tratar las manchas. Por supuesto, no pueden faltar los retinoides ( retinal , retinol, sodium retinoyl hyaluronate, tocopherey retinoate), para prevenir y tratar el envejecimiento cutáneo. La farmacéutica asegura que « la irritación no es obligatoria para que un retinoide funcione . Un buen retinoide no es siempre el más potente, sino el que realmente funciona para ti sin comprometer la función barrera». Además, también son importantes los hidroxiácidos (ácido glicólico, ácido láctico, ácido salicílico, gluconolactona). De hecho, Gema Herrerías considera que « exfoliar sí es necesario , aunque la piel se renueve cada 28 días. Cuanto más mayor te haces, más tienes que exfoliar, porque se va perdiendo la capacidad de renovación celular». Finalmente, los péptidos, los factores de crecimiento y los exosomas , que Gema Herrerías ha denominado «la nueva era de la cosmética», también son activos a tener en cuenta en la rutina. «No se trata de elegir unos u otros, sino de sumar».