Publicado: marzo 9, 2025, 8:31 am
El prÃncipe Frederik de Nassau, hijo de Roberto de Luxemburgo y sobrino del gran duque Enrique, ha muerto a los 24 años después de años de «batalla» con la enfermedad POLG, un trastorno mitocondrial genético que priva a las células del cuerpo de energÃa, lo que causa disfunción y falla progresiva de múltiples órganos.
Su fallecimiento tuvo lugar el pasado 1 de marzo en ParÃs, aunque ha sido este sábado cuando su padre ha dado a conocer la noticia en un extenso comunicado publicado en la web de la Fundación POLG, una organización fundada por el propio Frederik para apoyar la investigación sobre esta rara enfermedad.
Roberto de Luxemburgo también ha compartido cómo fueron los últimos momentos de su hijo y qué les dijo. Tal y como ha explicado, un dÃa antes de su muerte, el 28 de febrero, «Frederik encontró la fuerza y el coraje para despedirse de cada uno de nosotros».
«En el DÃa de las Enfermedades Raras, nuestro amado hijo nos llamó a su habitación para hablar con él por última vez«, ha recordado. «Ya le habÃa dicho todo lo que sentÃa en su corazón a su extraordinaria madre, que no se habÃa separado de él en 15 años. Después de regalarnos a cada uno de nosotros nuestras despedidas (algunas amables, algunas sabias, algunas instructivas) al más puro estilo de Frederik, nos dejó colectivamente con una última broma familiar. Incluso en sus últimos momentos, su humor y su compasión sin lÃmites lo obligaron a dejarnos con una última risa… para animarnos a todos», ha añadido.
Asimismo, Roberto de Luxemburgo ha revelado que la última pregunta que le hizo su hijo fue: «Papá, ¿estás orgulloso de mÃ?», unas palabras que le sorprendieron, ha confesado. «Apenas habÃa podido hablar durante varios dÃas, por lo que la claridad de estas palabras fue tan sorprendente como profunda la intensidad del momento. La respuesta fue muy fácil y la habÃa escuchado muchÃsimas veces… pero en ese momento necesitaba la seguridad de que habÃa contribuido con todo lo que podÃa en su corta y hermosa existencia y que ahora finalmente podÃa seguir adelante», se ha sincerado.
El joven nació con esta enfermedad rara, pero no fue hasta los 14 años que se le diagnosticó POLG, cuenta Roberto de Luxemburgo. Fue entonces «cuando sus sÃntomas se mostraban más claramente y cuando la progresión de su enfermedad se habÃa vuelto más aguda». Sin embargo, debido a que esta enfermedad cuenta con una amplia gama de sÃntomas y afecta a tantos órganos, «es muy difÃcil de diagnosticar y no tiene tratamientos, mucho menos cura».
Su propio padre ha comparado la enfermedad de Frederik «con tener una baterÃa defectuosa que nunca se recarga por completo, está en un estado constante de agotamiento y eventualmente pierde energÃa».
Roberto de Luxemburgo también ha puesto de relieve la labor de su hijo por ayudar a definir la Fundación POLG para concienciar e impulsar asà la investigación en esta enfermedad mitocondrial, una misión que ahora queda en manos de su familia. «Los avances en esta área podrÃan tener implicaciones de largo alcance para numerosas afecciones, incluido el envejecimiento, las enfermedades neurodegenerativas, el cáncer, las enfermedades infecciosas/inmunológicas y la salud mental», ha detallado.
«Frederik luchó contra su enfermedad valientemente hasta el final. Su indomable deseo de vivir lo impulsó a superar los desafÃos fÃsicos y mentales más difÃciles. Nuestro alegre Frederik vio la belleza en todo (…). Nos esforzaremos por seguir sus instrucciones, especialmente ahora que todo se siente un poco más frÃo y oscuro en su ausencia», ha dicho su padre.
Por último, Roberto de Luxemburgo se ha despedido con un mensaje de parte de toda la familia: «Con la ayuda de nuestro superhéroe esperamos convertir nuestro profundo dolor en resultados positivos y asà seguir su ejemplo inquebrantable. Su mensaje más importante es el de la esperanza, la compasión y la resiliencia. Estamos todos muy orgullosos de ti, Frederik. Yo estoy muy orgulloso de ti, te queremos».
